La verdad, es que estoy encantado con la posibilidad de jugar un Torneo IV Naciones, seguro que va a ser una experiencia muy bonita. Además, también tenía muchas ganas de reencontrarme con viejos compañeros, con los que he jugado y compartido muchas vivencias.
Para mí, este Torneo IV Naciones, que empieza esta misma tarde, es un reto más. Jugar contra potencias mundiales del balonmano internacional como lo son la anfitriona (Francia) o Dinamarca, e incluso comprobar el nivel del proyecto que Qatar tiene montado en sus categorías de base, es un gran aliciente.
Esta convocatoria es una excelente oportunidad para demostrar el nivel al que me encuentro y lograr asistir al mundial del próximo verano que se celebrará en Rusia. Poder ir a una cita tan importante como un Mundial sería un sueño y tengo todavía más ganas de cumplirlo después de quedarme a las puertas del pasado Europeo por haber tenido un año de bajo rendimiento acentuado por mi lesión en el menisco.
Sé que será difícil entrar en el grupo elegido por la calidad que hay en él, así que tendré que trabajar duro si quiero estar en la lista de convocados.
Soy consciente de que el sueño de ir al Mundial pasa por el trabajo diario con el Octavio, que me facilita poder aspirar a participar en estos eventos. Si no estoy al 120% en cada entrenamiento y en cada partido con el equipo, no habrá ninguna posibilidad de ser convocado.
El Octavio me ha dado el salto cualitativo que necesitaba para poder aspirar a estar entre los mejores de España de mi generación. La División de Honor Plata es una liga muy competitiva y muy igualada y eso me permite retarme cada día.
Estoy muy contento con la decisión que tomé al fichar por el Octavio, no podría haber elegido mejor destino: el equipo está plagado de juventud, y eso hace que en los entrenamientos intensidad y buen rollo vayan a la par.
Este jueves, a las 17:30 horas ante Dinamarca, toca subir el primer escalón para acercarse un poco más al sueño del mundial».
ANTERIORES ARTÍCULOS
Toni Corcera: «Mi vuelta a la Plata»
Tate Batán: «Una decisión acertada»