La primera parte resultó intensa y con alternativas. Fue el Deportivo el que salió más motivado. Los de Víctor Fernández asumieron desde el inicio un gran desgaste físico, su plan estaba claro: intentar ahogar la salida de balón celeste con una intensa presión y ganar la batalla del mediocampo. Lo logró durante muchos minutos. Al Celta le costaba combinar y el Deportivo se acercaba con peligro a la portería defendida por Sergio.
Los vigueses se dieron un pequeño respiro gracias a utilizar también el arma del rival. Charles se aprovechó de un despiste de Lopo para robarle el balón y el central no tuvo más remedio que agarrar al delantero, que se marchaba ya hacia portería. El árbitro le mostró tarjeta amarilla, pero podía haber visto la roja. En la jugada posterior, Augusto pudo haber marcado el gol del año. Remató de espuela desde fuera del área y el disparo bombeado a punto estuvo de colarse por la escuadra. Fabricio tuvo que sacar una mano salvadora.
El Deportivo siguió poniendo toda la carne en el asador y en una jugada de estrategia Cavaleiro enganchó un disparo que se marchó muy cerca del palo izquierdo de la portería defendida por Sergio.
El Celta necesitaba estirar líneas, encontrar a Krohn-Dehli y combinar en mediocampo. Aun le costaría unos minutos conseguirlo, pero aun así Orellana volvió a gozar de una ocasión al cuarto de hora. La respuesta la dio el ex céltico Oriol Riera, que disparó con mucha intención tras una buena maniobra. Sergio estuvo atento para despejar a córner el disparo de su amigo y ex compañero.
Mediado el primer tiempo, el Celta no había logrado equilibrar todavía la posesión. Pero por fortuna para los de Berizzo el cansancio empezó a hacer mella en los deportivistas. A la media hora, Krohn-Dehli ya reinaba en el centro del campo y se movía a la perfección entre líneas. Sus pases comenzaban a nutrir a los delanteros celestes, que ya inquietaban a Fabricio. Precisamente gracias a una asistencia del danés, el Celta gozó de la mejor oportunidad de la primera mitad. Charles, sin embargo, no acertó a controlar el balón y Fabricio aprovechó este error para adelantarse y despejar el peligro. Orellana, poco después, también lo intentó sin acierto.
El Celta era otro equipo en los últimos minutos de la primera mitad. El bajón físico del Deportivo era evidente y sin la presión asfixiante del inicio, los vigueses estaban siendo muy superiores. Solo faltaba el gol.
Y este llegó nada más empezar la segunda mitad. Augusto inició la jugada. El argentino, tras una galopada, envió al balón a Nolito, que se encontraba en la frontal del área. Tras un recorte, abrió el esférico a la banda derecha, donde apareció Orelllana. El chileno encaró a Fabricio y picó el balón al segundo palo, donde se encontraba Charles para cabecear a la red.
El tanto era el justo premio para un Celta que estaba siendo mejor desde que había logrado asentarse en el campo. El Deportivo, no obstante, no bajó los brazos y se lanzó a por el empate. Los de Berizzo supieron sufrir en estos minutos y los locales no gozaron de ninguna ocasión clara en estos minutos posteriores al gol a pesar de sus constantes acercamientos.
En el 64, el árbitro perdonó una nueva roja a un jugador del Deportivo. En esta ocasión a Lucas Pérez, al que solo le enseñó amarilla tras una durísima entrada sobre Orellana. Además, en la tangana posterior Nolito se llevó una tarjeta por ir a poner paz.
En todos los partidos importantes acaba apareciendo Sergio. El guardameta de Catoira fue de nuevo el salvador en una triple ocasión del Deportivo. Hizo dos paradas prodigiosas a dos lanzamientos consecutivos de jugadores deportivistas. Oriol Riera finalizó la jugada enviando el balón al larguero.
Tras este susto, el partido volvió a ponerse muy de cara para los celestes, ya que Pérez Montero enseñó la segunda cartulina amarilla a Lopo. Con uno más, parecía complicado que el partido se le escapase. Larrivey, que había salido al campo unos minutos antes en sustitución de Charles, dio la puntilla definitiva al Deportivo en el 81 y, de paso, acabó con su sequía goleadora. El argentino se aprovechó de un fallo garrafal de la defensa coruñesa para robarle el balón a Luisinho y batir a Fabricio. El partido se había acabado. Los tres puntos viajaban para Vigo
Deportivo: Fabricio; Juanfran, Lopo, Sidnei, Luisinho; Bergantiños, Borges; José Rodríguez (Cuenca, min. 55), Cavaleiro (Helder Costa, min. 68), Lucas Pérez y Oriol Riera.
Celta: Sergio; Sergi Gómez, Cabral, Fontás, Jonny; Radoja, Augusto, Krohn-Dehli (‘Tucu’ Hernández, min. 90); Orellana (Álex López, min. 76), Nolito y Charles (Larrivey, min. 72).
Goles: 0-1, min. 46: Charles; 0-2, min. 81: Larrivey.
Árbitro: Pérez Montero (colegio andaluz). Mostró tarjetas amarillas a los jugadores del Deportivo Lucas Pérez y Luisinho; y a los del Celta Nolito, Sergi Gómez y Charles. Expulsó a Lopo por doble amarilla a Lopo en el minuto 72.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la 24ª jornada de Primera División disputado en el estadio de Riazor.