Su trabajo como kayakista, entrenador y también presidente la realizó de forma intensa en el Kayak Tudense, entidad a la que ayudó a su fundación y también a su crecimiento. Durante muchos años presidió el club y también el Comité Organizador del Descenso del Miño.
Su vinculación con el mundo del piragüismo le llevó a ser también directivo de la federación gallega durante una prolongada época. Su pasión deportiva también la amplió a los medios de comunicación, ya que colaboró con varios de ellos. Desde hace varios años era una de las personas que habitualmente acudía a las regatas con su empresa Verde y Azul.
Alfredo Bea, presidente de la Federación Gallega de Piragüismo, lamentó la pérdida de «una persona que aportó muchas cosas al piragüismo y cuyo trabajo siempre fue impecable». Esteban Alonso, entrenador del Kayak Tudense, señaló que «estuvo siempre ayudando al club, desde sus inicios, con un esfuerzo que debe ser un ejemplo».