Despiden la temporada este sábado con un partido en el que no se juegan nada, al contrario que su rival, que tiene que ganar para evitar el descenso.
Es su última opción, su salvación pasa por ganar aquí si quieren depender de ellos mismos y que no haya sorpresas. Tenemos que demostrar esa misma intensidad que traigan ellos si queremos conseguir la victoria. Está claro que nosotros, al no jugarnos nada, tenemos ese pequeño hándicap que hay que trabajar. Hay que buscar la motivación para hacer un gran partido y despedirnos con victoria. Queremos irnos con buenas sensaciones y demostrando que el equipo ha mejorado en la segunda vuelta.
¿Qué balance hace de la temporada?
Si ganamos el sábado nos quedaremos a un punto de conseguir la misma puntuación que el año pasado. Esta plantilla se confeccionó con un objetivo totalmente diferente a la de la temporada pasada, por lo que para nosotros es un éxito. Hay que mirar con perspectiva la temporada. El inicio fue muy bueno, después de una muy mala pretemporada. El equipo empezó muy competitivo en los primeros partidos en casa, luego conseguimos sumar fuera. Tuvimos una racha de cinco derrotas consecutivas, pero el equipo se rehizo. Tras estar un poco más cerca del descenso, volvimos a dar la cara e incluso logramos durante algunas jornadas pelear por meternos en el ‘play-off’. La temporada ha ido de menos a más, con una progresión constante y sabiendo seguir siendo competitivos después de las malas rachas.
Esta es su primera temporada como entrenador de un equipo sénior. ¿Cómo valora la experiencia?
Estoy contento por cómo los jugadores han ido entendiendo lo que quería de ellos. Estoy satisfecho de su trabajo durante todo el año, de los entrenamientos que han hecho, de esa intensidad que han tenido en muchísimos partidos ante rivales de arriba. Gracias a esto no he echado tanto de menos ser jugador después de la retirada, he estado ahí pegado al balonmano y estoy contento con el trabajo de los chicos.
El presidente del Octavio, Javier Rodríguez, dijo este jueves en Radio Vigo que está convencido de que usted va a seguir siendo el entrenador del equipo la temporada que viene. ¿Usted lo tiene tan claro?
Igual él ya lo sabe de antemano. Yo quiero seguir, está claro que estoy muy contento aquí. Es mi primer año y todo ha salido muy bien, pero hay que hablar cosas. No todo va en relación al tema económico, es hacer las cosas bien. Él ha dicho que con Quique (Domínguez) no se reunía para hablar de su continuidad en el banquillo, pero yo soy una persona totalmente diferente y quiero que las cosas vayan como considero que es la forma correcta. Él ha dicho que en estos días hablaremos y por mi parte espero que no haya ningún problema. Habrá que hablar y habrá que discutir. Hablando se entiende la gente.
Por tanto, pondrá una serie de condiciones para seguir.
Siempre que hay dos partes cada uno quiere conseguir lo máximo. Luego, hay negociación. Vamos a intentar llegar a un acuerdo. Los dos queremos que yo siga, por lo que debería ser fácil llegar a un acuerdo.
El del Octavio es un proyecto de futuro en el que usted está teniendo mucha importancia por la confianza que está dando a los más jóvenes.
Los jóvenes han dado un paso al frente mucho antes de lo que podíamos pensar. Yo tenía confianza en ellos, pero han explotado antes de lo que pensaba. El proyecto es ilusionante porque han ido de menos a más y tienen todavía un amplio magen de mejora. Seguramente el año que viene estarán mejor y me gustaría estar con ellos. Pero, como ya he dicho, es cuestión de sentarse, hablar y empezar a planificar la temporada. Los que tienen contrato seguirán y se buscará gente para sumar y que el equipo sea más competitivo.
Su presidente cree que el objetivo para la próxima temporada debe ser entrar en el ‘play-off’ de ascenso. ¿Está de acuerdo?
Esos son cosas que tengo que discutir con Javier. Todo tiene que ir en consonancia y todo está un poco ligado al aspecto económico. Tendremos que sentarnos, ver cuáles son las bases, dónde estamos, dónde podemos llegar y ver la realidad de los números. A partir de ahí, veremos si es factible luchar por algo más. Hay que intentar que el proyecto sea lo más realista posible y no construir castillos en el aire. Lo que no puede ser es que por querer dar un paso más grande de lo esperado nos peguemos un batacazo.