El encuentro fue muy igualado en todo momento. Ambos equipos no escatimaron esfuerzos en ataque y gracias a eso se pudo ver un partido muy bonito y abierto, en el que las defensas poco pudieron hacer.
Al descanso el marcador era de 15-15, y hasta bien entrado el segundo tiempo no se pudieron ver ventajas importantes en el electrónico. A falta de cinco minutos para la finalización del encuentro, las de Estévez se hacían con una renta de tres goles de ventaja (29-32), que no supieron defender, para terminar empatando un vibrante duelo.
Por su parte, el Mecalia Guardés recibió en A Sangriña al colista de la categoría, el ya descendido Adesal Córdoba. Los 550 aficionados que vieron el partido disfrutaron con la victoria de su equipo, que con esta victoria certifica su tercera plaza en el campeonato.
Tras un comienzo titubeante, en el que las de Manu Etayo no lograban despegarse en el marcador, las guardesas lograron una racha de buenas defensas, que unido al acierto ofensivo, permitía a las locales llegar al descanso con una ventaja de 16-11. Tras el paso por vestuarios las chicas de Etayo siguieron mentalizadas en el encuentro, hasta vencer por un cómodo 30-22.
La próxima jornada ambos equipos se enfrentarán en un derbi con nada en juego, pero seguro que ambos equipos buscarán la victoria. La semana que viene, en el Municipal de Porriño, las guardesas intentarán vencer a un equipo que tratará de darle una alegría a su afición.