Como adelantó en la previa, Berizzo dispuso el once de gala, el que debería alinear también en el primer partido de Liga ante el Levante. Eso sí, hubo una baja de última hora, ya que Gustavo Cabral no jugó debido al fallecimiento de un familiar. Su puesto lo ocupó Sergi Gómez. En el centro del campo, el técnico volvió a apostar por un triángulo formado por Augusto, Wass y Tucu Hernández. Este último estuvo especialmente entonado, demostrando que este sí puede ser su año. Arriba, el tridente perfecto: Orellana en la banda izquierda, Aspas en punta y Nolito por la derecha. Los tres se entendieron, disfrutaron e hicieron disfrutar a la grada.
El partido comenzó muy bien, ya que a los tres minutos Tucu Hernández hizo el primer gol. Nolito envió un buen balón al área a Iago Aspas y este, en un alarde de generosidad, cedió el esférico atrás para que el Tucu marcara a placer. Fútbol de salón ante un rival con cinco atrás pero relajado en exceso.
El recital continuó durante los siguientes minutos. Orellana se movía por todo el terreno de juego, Nolito desbordaba, Augusto mandaba, Wass y el Tucu surtían de balones a la delantera y Aspas se desmarcaba. El plan perfecto.
El segundo tanto llegó al cuarto de hora. Nolito vio la incorporación de Hugo Mallo por banda derecha. El lateral de Marín centró bombeado al segundo palo. El meta rival no llegó y Aspas cabeceó a portería sin oposición. Coser y cantar.
El Genoa era incapaz de frenar el vendaval de juego celeste. Cuando conseguía hacerse con la posesión de balón, la maquinaria de presión del Toto Berizzo se ponía en funcionamiento ahogando el juego italiano. No había escapatoria.
El Celta se lo estaba pasando en grande. Orellana y Nolito han encontrado un nuevo socio perfecto en Iago Aspas y entre estos tres futbolistas se construyó el tercer tanto celeste. Orellana cambió el juego hacia la banda de Nolito. El gaditano bajó el balón con un sublime control y se lo entregó a Iago Aspas, que prácticamente desde el punto de penalti batió al portero rival. Era el minuto 23 y el marcador ya reflejaba la tremenda superioridad del Celta: 3-0.
En el segundo tramo de esta primera parte, Nolito se empeñó en marcar. El gaditano sabía que muchas miradas estaban puestas en él y quería agradar. La grada coreaba el “Nolito quédate” mientras él buscaba de todas las formas posibles el gol. Y casi lo encuentra de la manera más inverosímil, ya que estrelló en el larguero un lanzamiento directo de córner.
Se llegó al descanso con un 3-0 y con la sensación de que el Celta ya está preparado para el inicio de una temporada en la que se esperan muchas alegrías.
El inicio de la segunda parte fue de ritmo más bajo. Pero el partido se volvió a animar en el 65. Berizzo dio entrada en el campo a Guidetti, en el que era su debut en Balaídos. Y casi repite la proeza lograda en su estreno con la camiseta celeste. Pero esta vez no marcó en el primer balón que tocó, hubo que esperar al segundo. Porque en el primero, recibió un buen pase de Iago Aspas, pero su remate se estrelló en el cuerpo del portero rival. Unos segundos después y en una jugada muy similar, ya no perdonó. Esta vez su asistente fue Orellana. El olfato de gol del sueco está ya fuera de toda duda.
Los últimos minutos sirvieron para ver debutar a Dejan Drazic con la camiseta del Celta. Por lo demás, el Genoa trató de marcar el gol del honor, pero los celestes no sufrieron en exceso. El Memorial Quinocho, como viene siendo habitual, se quedó en Vigo y los celestes demostraron que están listos para iniciar la temporada.
Celta: Rubén; Hugo Mallo (Planas, min. 82), Sergi Gómez, Fontás, Jonny; Augusto Fernández, Wass (Radoja, min. 70), Tucu Hernández (Guidetti, min. 65); Orellana (Bongonda, min. 78), Aspas (Señé, min. 81) y Nolito (Drazic, min. 70).
Genoa: Lamanna; Cissokho, Marchese, Burdisso, De Maio, Laxalt; Tino Costa, Kucka; Lazovic, Pandev y Perotti. También jugaron: Izzo, Muñoz, Tomás Rincón, Ntcham, Tachtsidis, Ghiglione.
Goles: 1-0, min. 3: Tucu Hernández; 2-0, min.16: Iago Aspas; 3-0, min. 23: Iago Aspas; 4-0, min. 66: Guidetti.
Árbitro: Vicandi Garrido (colegio vasco). Amonestó a los jugadores del Genoa Burdisso, Kucka y Tomás Rincón y al céltico Nolito.
Incidencias: Partido correspondiente al XX Memorial Quinocho disputado ante 9.171 espectadores. Se guardó un minuto de silencio en memoria del piloto moañés Dani Rivas, fallecido en un trágico accidente en el circuito de Laguna Seca, y del familiar de Gustavo Cabral Agustín Miranda.