Y es que los resultados de las elecciones generales del pasado domingo han ofrecido un panorama político en Vigo totalmente distinto al de las municipales del mes de mayo. La gran triunfadora en los últimos comicios ha sido la coalición En Marea, que ha obtenido casi 60.000 votos y un porcentaje del 34%. El PP ha quedado en segundo lugar, con un 27,7%, mientras que el PSOE, que en las municipales obtuvo más de la mitad de los votos, se ha tenido que conformar en estas con un pobre 22%. Por su parte, Ciudadanos ha triplicado su apoyo consiguiendo casi un 10%.
Las motivaciones para votar a uno u otro partido son muy distintas en unas elecciones municipales y en unas generales, por lo que los datos no pueden ser del todo extrapolables. Aun así, estos resultados pueden marcar una tendencia y han de ser tomados en cuenta en términos de políticas municipal.
Si las elecciones de este domingo hubiesen sido municipales en vez de generales, el reparto de concejales sería muy distinto al que salió de las urnas el pasado mes de mayo. En Marea sería la primera fuerza política, con 10 concejales, 7 más de los que consiguió en las municipales. El PSOE, que gobierna con mayoría absoluta en Vigo, perdería 11 representantes y se quedaría con solo 6, mientras que el PP ganaría 1, pasando de 7 a 8. Por último, aparecería una nueva fuerza política en el Concello: Ciudadanos obtendría 3 concejales.
Debemos recordar que la mayoría absoluta en Vigo se sitúa en 14 concejales, por lo que con estos resultados, y siguiendo con este ejercicio de ‘política ficción’, existirían tres escenarios posibles: un alcalde en minoría de En Marea, uno de la coalición de izquierdas apoyado también por el PSOE o un gobierno del PP con los votos de los socialistas. La cuarta opción, la de un gobierno en coalición entre En Marea y el PP, aunque sea aritméticamente posible resulta políticamente impensable.
La irrupción de Ciudadanos llama la atención porque en las municipales, a pesar de que alguna encuesta previa le otorgaba representación en el Concello, se quedó muy lejos de conseguir un concejal. Este partido incluso fue superado claramente entonces por el BNG, que en las elecciones de este domingo solo consiguió con su marca Nós un 2,9% de los votos en Vigo.
Las europeas de 2014 ya advirtieron de esta tendencia
Las elecciones europeas de 2014 también presentaron un panorama político en Vigo completamente distinto al de las municipales. Estos comicios destacaron por su bajo nivel de participación. Aun así, los datos marcaron una tendencia que se vio refrendada en estas generales. En aquella ocasión, el partido más votado fue el PP, que hubiera logrado 9 concejales en el caso de que esas elecciones fueran municipales, uno más que ahora. El PSOE obtendría 8 -dos más que este domingo-, AGE (la coalición de Anova e Izquierda Unida) y Podemos, 4 cada uno, y el BNG, 2.
AGE y Podemos han ido de la mano en estas últimas generales, por lo que habría que sumar sus concejales. Si a ellos les añadimos los 2 del BNG, que cuenta con un electorado de un perfil similar y que parece que en los últimos comicios se ha trasladado masivamente a En Marea, ya tenemos los 10 concejales que obtendría ahora la coalición de izquierdas.
2015 y 2011: Caballero y la brecha con el PSOE
En 2011, los resultados que obtuvo el PSOE en las elecciones municipales fueron bastante similares a los que consiguió unos meses después en las generales. En las primeras, Caballero logró unos 50.000 votos, siendo la segunda fuerza más votada por detrás del PP. Unos meses después, Rubalcaba consiguió en la ciudad 55.000 votos. En 2015, sin embargo, se ha abierto una brecha entre el PSOE local y el estatal. Caballero obtuvo en el mes de de mayo unos resultados históricos: más de 73.000 votos, lo que suponía el apoyo de más de la mitad del electorado vigués, consiguiendo una clara mayoría absoluta; mientras que este domingo el PSOE se ha convertido en la tercera fuerza con menos de 39.000 votos.
La conclusión que se puede extraer es que Caballero ha sabido captar electorado que tradicionalmente votaba a otros partidos y no solo se ha librado de la tendencia a la baja del PSOE en el conjunto del estado, sino que ha salido reforzado.