El Celta saltó al campo con la alineación esperada (quizá la única sorpresa fue la presencia de Sergio en portería) y con la firme intención de comenzar con buen pie el esprint final por Europa ante un rival directo. Se hizo dueño del balón, aunque el Eibar, muy correoso, le impedía llegar arriba con claridad. Marcelo Díaz trataba de distribuir juego, pero a veces arriesgaba demasiado y estuvo a punto de meter en un aprieto a su defensa en más de una ocasión.
El objetivo era encontrar al tridente de arriba. Cuando Bongonda, Guidetti y Aspas aparecían, el Eibar temblaba. Especialmente entonado se estaba mostrando el belga, un estilete en banda izquierda. De sus botas nació la primera acción con verdadero peligro de los celestes. Bongonda arrancó desde la izquierda, envió el balón al área y allí Guidetti hizo una dejada de tacón para Aspas. Un defensa llegó antes que el moañés. Solo cinco minutos después, Wass lo probó desde fuera del área. Su disparo se fue rozando el palo.
El Eibar también mostró los dientes en el primer tramo del partido. El encargado de hacerlo fue el japonés Inui, que con calidad se marchó de varios defensas y envió un peligroso centro al área al que milagrosamente no llegó ningún compañero. La réplica celeste corrió a cargo del tridente. En una jugada calcada a la que se produjo unos minutos antes, Bongonda arrancó, filtró el esférico para Guidetti y el sueco, con un nuevo taconazo, lo dejó franco para Aspas. El morracense llegó a disparar en esta ocasión, pero el lanzamiento se marchó fuera.
El partido se estaba animando y en el minuto 22 llegó una acción clave. Sergi Gómez, agobiado por la presión del Eibar, falló en un pase y le regaló el balón a un rival. La pelota acabó en los pies de Borja Bastón, que tenía toda la portería para él. Sin embargo, en el último momento llegó Cabral. El central celeste evitó el tanto y, posiblemente, cometió penalti al hacerlo. El árbitro, no obstante, no vio punible esta acción y no señaló una pena máxima que además debería ir acompañada de una roja.
De un escenario posible tan desfavorable como el de un 0-1 con un jugador menos, se pasó a otro completamente distinto en solo ocho minutos. Y es que el Celta se supo aprovechar de un error de la defensa vasca para adelantarse en el marcador. El central Dos Santos falló una entrega, brindándole el balón a Aspas. Este arrancó hacia el área y en vez de encarar a Riesgo, le pasó el esférico a Guidetti. El sueco superó al portero eibarrense.
El Celta se creció tras el tanto y el Eibar empequeñeció un poco más. Los celestes tenían controlado el partido y parecía que era cuestión de tiempo que llegase el segundo gol. Estuvo cerca de lograrlo Bongonda tras una conexión con Guidetti. Su disparo fue despejado por Riesgo.
Solo un par de minutos después, el Celta encarriló el encuentro gracias a un protagonista inesperado. Jonny se estrenó como goleador en Primera División con un disparo desde la esquina del área. Tras el golpeó del lateral, el balón rozó la pierna de un defensa, lo que despistó al meta visitante.
Se llegó al descanso con una clara ventaja para el Celta y con la impresión de que tenía el partido completamente controlado.
En la segunda parte el Eibar no ofreció síntomas de recuperación. Los de Berizzo jugaron a su antojo. Wass estaba dando una auténtica clase magistral y los de arriba disfrutaban. En el 66, Guidetti desaprovechó una clara ocasión tras un pase de Tucu Hernández, pero dos minutos después ya no perdonó. La jugada del tanto fue casi perfecta. Wass vio la incorporación de Hugo Mallo por banda derecha. El marinense rompió la defensa del Eibar y le cedió el esférico a Guidetti para que marcase a placer.
Todo estaba saliendo a pedir de boca. A la afición le faltaban manos para aplaudir, ya que a continuación del tercer tanto celeste se produjo el regreso de Nolito, al que Balaídos dio la bienvenida con una sonorísima ovación.
El Celta dispuso de más ocasiones en los siguientes minutos e incluso Aspas envió un balón al palo y, poco después, le anularon un gol por fuera de juego. Pero fue el Eibar el que marcó. Lo hizo de penalti tras una mano de Sergi Gómez dentro del área. Saúl Berjón fue el encargado de transformar la pena máxima. El partido aún reservaba una última sorpresa, ya que a cuatro minutos para el final el japonés Inui apretó aun más el marcador con un disparo cruzado desde el borde del área. Tocaba sufrir en los últimos minutos, pero por fortuna el Celta supo resistir.
Al final, los celestes lograron tres importantes puntos que le permiten auparse a la sexta plaza, a la espera de lo que haga este domingo el Athletic ante la Real Sociedad.
Celta: Sergio; Hugo Mallo, Cabral, Sergi Gómez, Jonny; Marcelo Díaz, Wass (Radoja, min. 84), Tucu Hernández; Iago Aspas, Guidetti (Beauvue, min. 77) y Bongonda (Nolito, min. 70).
Eibar: Riesgo; Lillo (Capa, min. 46), Dos Santos, Ansotegi, Juncá; Radosevic (Saúl Berjón, min. 65); Jota, Escalante, Adrián, Inui; y Borja Bastón (Enrich, min. 70).
Goles: 1-0, min. 30: Gidetti 2-0, min. 38: Jonny; 3-0, min. 68: Guidetti; 3-1, min. 83: Saúl Berjón; 3-2, min. 86: Inui
Árbitro: Melero López (colegio andaluz). Mostró tarjetas amarillas a los locales Tucu Hernández, Nolito y Sergi Gómez; y a los visitantes Lillo y Capa.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la 25ª jornada de Primera División disputado en el estadio de Balaídos ante unos 15.000 espectadores espectadores. Se guardó un minuto de silencio por los fallecimientos del exportero del Celta José Bermúdez y el abonado histórico Emilio Márquez. En los prolegómenos del encuentro, el Celta brindó un homenaje al jugador vigués de fútbol sala Adrián Alonso ‘Pola’, que recientemente se proclamó campeón de Europa con la selección española.