Según informó este lunes la Comandancia de Pontevedra, la investigación llevada a cabo por el Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Vigo se inició al tener noticia de que uno de los trabajadores de una empresa dedicada a la construcción, con domicilio social en Soutomaior, había tenido un accidente grave cuando se encontraba realizando unos trabajos en el interior de una nave empresarial en el municipio de Mos.
Según las primeras versiones facilitadas por los compañeros, este operario se encontraba en una plataforma elevadora realizando un trabajo en el tejado de una empresa ubicada en el polígono industrial de Arrufana en el término municipal de Mos. En un momento determinado y cuando estaba retirando los enganches metálicos que sujetaban las uralitas al tejado, se precipitó al suelo desde una altura de algo más de cinco metros, golpeándose en la cabeza contra un mesado de trabajo.
Como consecuencia del accidente tuvo que ser asistido en el Hospital Alvaro Cunqueiro de Vigo, en cuya UCI permanece ingresado en estado estable, dentro de la gravedad, con traumatismo craneoencefálico y respiración asistida.
«La supuesta ilegalidad que dio lugar a la posterior detención del responsable de la obra en la que estaba trabajando el accidentado surge cuando el Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil detecta que el operario accidentado se encontraba realizando el trabajo sobre un tejado de fibrocemento (uralita con amianto) sin los medios que determina el Plan de Seguridad y Salud», señala la Comandancia en un comunicado.
Además, entre otras supuestas irregularidades, el equipo de investigación también pudo averiguar que también «habían limpiado y manipulado el lugar donde se había producido el siniestro, antes de que llegase la Guardia Civil para realizar la correspondiente inspección técnico-ocular, con la presunta intención de desdibujar y alterar las circunstancias en las que se produjo el accidente».
Las diligencias instruidas por la Guardia Civil fueron entregadas en el Juzgado de Instrucción núm. 1 de O Porriño, que entiende del caso, en tanto que la persona detenida quedó en libertad en sede policial con el compromiso y la obligación de comparecer ante la autoridad judicial cuando fuese requerido.