Se baila en todo el mundo, en salas y también en lugares abiertos, en calles y en plazas, como este caso, en la Puerta del Sol, de la ciudad de Vigo. Muchas parejas que están evolucionando al ritmo de un tango corresponden a un grupo de baile de una academia, pero a ellas también se han sumado otras parejas espontáneas, tanto españolas como argentinas y de otros países que sienten la fuerza de esa música ya universal que popularizó el inmortal Carlos Gardel. Hace varias décadas, las circunstancias forzaron a muchos gallegos a emigrar a Argentina, y otros motivos trajeron a muchos argentinos a las tierras gallegas, es obvia, por lo tanto, la existencia de una gran unión entre ambos países, pero en sus gentes, unas y otras, alejadas de su país de nacimiento, siempre existe el sentimiento del regreso, el sentimiento de poder volver.