La primera parte del Celta resultó desesperante. El equipo de Berizzo acaparó la posesión, pero repitió viejos errores. Su dominio fue totalmente inane y su brioso inicio de partido se fue evaporando con el paso de los minutos. Fruto de esta enérgica salida llegó la primera ocasión, y una de las más claras de este primer periodo. Cabral, tras un lanzamiento de córner, cabeceó completamente solo. El balón, sin embargo, se fue manso a las manos de Cuéllar.
Como hemos dicho, el ímpetu del Celta se fue desgastando con el paso de los minutos, dando paso a una tediosa primera mitad en la que los de Berizzo volvieron a ser un equipo predecible. El Sporting, por su parte, se mantenía bien ordenado e intentaba salir a la contra de vez en cuando. Los de Abelardo lo tenían claro: un punto era un buen botín tras su gran inicio de Liga y solo irían a por los tres si el Celta le daba facilidades.
Aspas, en punta, mantenía un conflictivo duelo con el aguerrido Amorebieta en el que saltaban chispas. Por las bandas, Bongonda y Pione Sisto lo intentaban con poco acierto e inteligencia. Buscaban la misma jugada una y otra vez. Sus movimientos eran fáciles de leer para la defensa gijonesa. Eso sí, Bongonda dispuso de una ocasión en el minuto 19. Fue por medio de un disparo lejano que Cuéllar despejó de puños.
El Celta era improductivo en ataque y también volvió a evidenciar alguna laguna atrás. Al filo de la media hora, Sergi Gómez perdió un peligrosísimo balón en las inmediaciones del área. Por fortuna, la jugada acabó con un disparo muy desviado de Víctor Rodríguez mientras Viguera reclamaba un penalti que pareció no existir.
Tras este susto, el conjunto celeste continuó con su desesperante plan y la grada se empezó a impacientar. De hecho, se escuchó algún silbido después de que Bongonda tomase la peor decisión en el momento clave por enésima ocasión. El Celta, sorprendentemente, solo lograba crear un mínimo peligro a balón parado. Y es que cuando le tocaba atacar con el esférico en movimiento mostraba demasiada parsimonia, muy poca intención y nula verticalidad (excepto cuando jugaba hacia atrás). Esta primera parte borró de un plumazo las buenas sensaciones de Pamplona. Este miércoles, al Celta, además de gol, le faltaba crear peligro.
La tónica tras el descanso no cambió. Las sensaciones seguían siendo rematadamente malas. El Celta acaparaba el balón pero su ataque era desesperante. En el 50, Aspas trató de tomarse la justicia por su mano. Agarró un balón en medio campo, se marchó hacia el área y tras recorrer la frontal, envió un disparo que se marchó desviado. Ese no era el camino más ortodoxo hacia el gol, pero Balaídos agradeció su arranque.
En el minuto 58 se produjo un cambio táctico fundamental: Bongonda y Pione Sisto intercambiaron su posición. El danés se mostró muchísimo más acertado en la banda derecha y en el 60 ya había obligado a intervenir a Cuéllar con un potente centro-chut. El joven Sisto volvió a ser protagonista en el gol. Se internó en el área, regateó a un par de contrarios y cuando llegó a línea de fondo envió el pase atrás. Allí estaba Hugo Mallo, que se ha incorporado al ataque. El disparo del lateral pegó en Amorebieta y en Cuéllar antes de introducirse en la portería.
Parecía que esta vez sí, que el Celta sumaría su primera victoria. Pero el partido reservaba sorpresas. Mientras Berizzo se llevaba algún pito por sentar a Pione Sisto, el Sporting dio un leve paso hacia adelante. Y en una jugada a balón parado llegó la jugada del primer penalti. Roncaglia derribó a Cop dentro del área y Melero López no lo dudó. El propio delantero croata transformaría la pena máxima.
Quedaban diez minutos y el Celta se fue al ataque y obtuvo premio de una forma inesperada. Amorebieta cometió un penalti inexplicable al zancadillear a Radoja desde el suelo. Iago Aspas no falló e hizo el 2-1. Al final, una victoria que permite al Celta respirar.
Celta: Sergio Álvarez; Hugo Mallo, Cabral, Sergi Gómez, Roncaglia: Radoja, Wass (Rossi, min. 80), Tucu Hernández; Bongonda, Iago Aspas (Jonny, min. 89) y Pione Sisto (Marcelo Díaz, min. 74).
Sporting de Gijón: Cuéllar; Lora, Babin, Amorebieta, Lillo (Burgui, min. 74); Víctor, Xavi Torres, Sergio Álvarez, Afif (Isma López, min. 57); Cop y Viguera (Carlos Castro, min. 74).
Goles: 1-0, min. 65: Hugo Mallo; 1-1, min. 79: Cop, de penalti; 2-1, min. 86: Iago Aspas, de penalti.
Árbitro: Melero López (colegio andaluz). Mostró tarjetas amarillas a los locales Radoja y Roncaglia; y a los visitantes Amorebieta y Borja Viguera.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la 5ª jornada de Liga de Primera División disputado en el estadio de Balaídos.