Al igual que hizo ante el Granada, Berizzo optó por reforzar el centro del campo ante un rival que jugó con cinco atrás. De esta manera, Radoja y Marcelo Díaz repitieron en la medular junto a Tucu Hernández, la novedad en el once de este domingo. Arriba, Bongonda actuó por la izquierda, Aspas en punta y Wass, partiendo desde la derecha, se movió por todo el campo.
El Celta movió con fluidez el balón en los primeros minutos. Tenía superioridad en el centro del campo y se encontraba cómodo. El Betis apenas presionaba y los de Berizzo se decidieron a jugar con paciencia, circulando el balón con criterio y tratando de encontrar huecos en la tupida defensa verdiblanca.
El peligro celeste llegaba desde la izquierda. Un entonado Bongonda, que parece que se ha sacado un peso de encima tras su estreno goleador ante el Granada, estaba siendo un auténtico incordio para la zaga del Betis. Primero, forzó una amarilla en una jugada en la que se marchó de Donk y se disponía a internarse en el área. Después, en el minuto 14, inició la acción del 1-0. El belga recibió en la banda, se fue hacia línea de fondo y centró al área. El balón se paseó por delante de la portería sin encontrar rematador. En la derecha recogió el esférico Wass, que volvió a centrar. El danés sí que encontró a Iago Aspas, que se coló entre lo centrales para empujar el cuero a la red. El moañés, con su octavo gol del curso, adelantaba al Celta en el Benito Villamarín.
Los célticos siguieron con el plan establecido tras este tanto. Continuaban moviendo el balón con relativa comodidad y a pesar de no disponer de claras ocasiones -la única con peligro fue un disparo lejano de Wass que Adán despejó con el pecho-, tenían el control del partido. Pero el panorama cambió a la media hora. El Betis por fin se decidió a dar un paso hacia adelante y presionar la salida de balón viguesa.
Radoja y Marcelo Díaz ya no se sentían cómodos. Habían perdido su superioridad en la medular. Además, el partido se volvió bronco y se sucedían las protestas de los jugadores del Betis. El conjunto sevillano comenzó a pisar el área céltica. Primero lo hizo sin peligro, pero a medida que se acercaba el descanso la defensa céltica sufría más.
En el minuto 39, Jonny trató de salir con el balón jugado y lo perdió. El Betis envió el esférico al área, Petros intentó recibir de espaldas y fue arrollado por Fontás. El árbitro no lo dudó y señaló este infantil penalti del central catalán. Rubén Castro fue el encargado de transformarlo. Con este mazazo se llegó al descanso.
Esta peligrosa tónica continuó al inicio del segundo tiempo. El Betis se pareció poco al del principio de la primera mitad y el Celta estaba totalmente noqueado. A los dos minutos de la reanudación, Rubén Castro envió un disparo al palo desde fuera del área. Poco después, Durmisi también lo probó y el esférico se marchó rozando la madera. Se mascaba el segundo gol del Betis y este llegó en el 52. Rubén Castro envió un buen pase a Sanabria y este, con un poco de suerte, regateó a Rubén Blanco. Disparó a puerta y Cabral, que se encontraba en línea gol, no pudo evitar que el cuero se colase en la portería.
Solo unos segundos antes, había entrado en el campo Orellana, tras más de un mes de ausencia. El chileno sustituyó a Radoja, que se marchó al banquillo con problemas físicos. El Celta intentó retomar el control del encuentro y ponerle pausa al juego. Lo consiguió y pronto consiguió premio. Orellana fue fundamental, ya que se inventó un gran pase para Bongonda. El belga, desde línea de fondo, envió el balón a atrás y en el área pequeña Iago Aspas, totalmente solo, empató el partido.
Tras la igualada, parecía que el Celta incluso podía llevarse la victoria. Pero el juego aéreo del Betis se impuso poco después. El 3-2 llegó en una jugada a balón parado. Pezzella, con un gran testarazo, batió a Rubén a poco más de un cuarto de hora para el final.
Al Celta no le sentó nada bien este gol y el Betis dispuso de un par de ocasiones para sentenciar. Pero a los de Berizzo les quedaba todavía una última bala. En una jugada a balón parado, bajo un aguacero, Roncaglia, con un gran testarazo, volvió a empatar el partido y permitió a los célticos llevarse un valioso punto antes de afrontar el decisivo partido de Liga Europa del próximo jueves en Atenas.
Betis: Adán; Álvaro Cejudo, Bruno (Rafa Navarro, min. 46), Pezzella, José Carlos, Durmisi; Petros, Donk (Felipe Gutiérrez, min. 69), Ceballos; Sanabria (Joaquín, min. 61) y Rubén Castro.
Celta: Rubén Blanco; Roncaglia, Cabral, Fontás, Jonny; Marcelo Díaz (Pione Sisto, min. 76), Radoja (Orellana, min. 51), Tucu Hernández; Wass, Bongonda (Rossi, min. 83) y Iago Aspas.
Goles: 0-1, min. 14: Iago Aspas; 1-1, min. 40: Rubén Castro, de penalti; 2-1, min. 52: Sanabria; 2-2, min. 60: Iago Aspas; 3-2, min. 72: Pezzella; 3-3, min. 83: Roncaglia.
Árbitro: Sánchez Martínez (colegio murciano). Mostró tarjeta amarilla a los locales Donk, Sanabria, Pezzella y Felipe Gutiérrez y al visitante Cabral. Expulsó por doble amarilla a Petros en el minuto 91.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la 14ª jornada de Primera División disputado en el estadio Benito Villamarín de Sevilla ante 27.241 espectadores. Antes del inicio del partido se guardó un minuto de silencio en memoria de los fallecidos en el accidente aéreo del club brasileño Chapecoense.