El esquí combina paisajes y deporte. Así, esquiar Andorra y sus estaciones es la garantía de contar con buenas proporciones de ambos. Ski y Andorra se convierten en una pareja indisociable, el destino preferido para los amantes de la nieve.
Andorra cuenta con un buen surtido de estaciones, y multitud de pistas para todos los niveles, por lo que siempre habrá una opción adaptada a los conocimientos de esquí del usuario, para que este esquíe cómodamente en función de sus capacidades.
Entre sus estaciones, cabe destacar Grandvalira, conocida por ser una de las más grandes de todo el Pirineo. Además, sus paisajes inigualables hacen de ella un enclave único para aquellas personas sensibles a la belleza de la naturaleza.
Debido a lo anterior, así como por las interesantes ofertas que se pueden encontrar a través de Internet para esquiar en Grandvalira, esta ha sido escogida como uno de los destinos preferidos para los amantes del esquí.
Se pueden encontrar packs y ofertas que incluyen tanto el Ski Hotel como el Forfait entre semana y fines de semana, una opción que supone un ahorro interesante, además de ahorrar tiempo en la búsqueda y contratación de los diversos servicios.
Su intensa actividad permite que las infraestructuras estén en continuo proceso de mejora y adaptación. Tanto es así que nuevos telesillas, como el Planell de la Font, se van construyendo cada año para abastecer semejante demanda.
Granvalira también ha adquirido 5 nuevas máquinas ratract para enfrentarse a la temporada de esquí 2016-2017, 3 de ellas troll, 1 estandar y 1 para snowparks, mejorando más si cabe las prestaciones a los usuarios.
Esta gran inversión es posible debido a los 13 millones de euros invertidos en la estación de Grandvalira durante esta temporada, otro paso más de Andorra de cara a convertirse en el líder de esquí en el Pirineo.
Tanto es así que acoge en sus pistas diversos campeonatos a nivel mundial, como los Free Ride Junior World Championships, que tuvieron lugar en este tesoro natural de Andorra en febrero de 2017.
Este tipo de competiciones son un gran reclamo para jóvenes y no tan jóvenes, que se desplazan para ver competir a sus ídolos en un mundial deportivo de una belleza inconmensurable.
Este tipo de eventos también suponen una gran ventaja competitiva frente a otras estaciones en el Pirineo, tanto andorrano como español, puesto que traen consigo numerosas fiestas y mucho ambiente para el resto de los usuarios.
De hecho, gracias a la intensa actividad que reciben las pistas de Andorra durante la temporada de esquí, se ha contratado un servicio de foodtrucks en la nieve, para que esta moda pase de ser sobre ruedas a estar disponible también en la nieve.
Otra de las estaciones estrella de Andorra es Vallnord, que cuenta con 89km esquiables y un estado de pistas generalmente envidiable. Incluye dos estaciones con todas las prestaciones posibles.
Vallnord se ha convertido en la meca del «freeride» en el Pirineo. Sus montañas y las excelentes condiciones de su nieve han convertido el esquí fuera de pista en una de las disciplinas más reclamadas por sus usuarios en esta estación.
Para los más pequeños y aquellos que se estén iniciando en el mundo del esquí, se ofrecen cursillos de iniciación de la mano de los mejores monitores de las estaciones, que les iniciarán en los principios básicos de este deporte.
También se pueden contratar cursillos de perfeccionamiento para los que quieran depurar su técnica y conseguir un mejor estilo. Estos se adaptan a todos los niveles y ofrecen una atención personalizada.
En el esquí resulta imprescindible que el monitor se centre casi exclusivamente en el cliente, puesto que se trata de un deporte muy técnico, y los pequeños errores han de ser identificados y corregidos con un trabajo muy específico.
Otra gran ventaja de las estaciones en Andorra con respecto a las de otros lugares del Pirineo es la abundante oferta de material para alquilar. Muchos usuarios carecen de ropa de nieve propia, y en las estaciones se les facilita todo lo necesario a buen precio.
El usuario se puede informar en todo momento del estado de las pistas y las condiciones meteorológicas, para cerciorarse de que la subida a las mismas sea del todo fructífera para disfrutar de un buen día de esquí.
Todo lo anterior resume brevemente algunas de las ventajas que tienen las estaciones de esquí de Andorra frente a muchas otras del Pirineo, pero siempre será mejor una experiencia de primera mano que las confirme con su propio criterio.
En definitiva, Andorra tiene en su mano la clave para convertirse en el destino de esquí por excelencia dentro del Pirineo. Esquiar en Andorra es todo un placer, debido a una mezcla única de pistas, paisajes, infraestructuras y mucha nieve.