Los hechos, según informó este lunes la Comisaría de Vigo, ocurrieron a última hora de la madrugada del domingo cuando varias llamadas informaban de que en la calle Churruca se había producido un accidente de tráfico y el conductor se había dado a la fuga, abandonado su coche en medio de la calle.
Al llegar los agentes vieron un todoterreno parado en el centro de la calzada en sentido contrario a la marcha y sin nadie en el interior, acercándose a los agentes un joven que manifestó que cuando se encontraba detenido en el semáforo del cruce calle Uruguay con calle República Argentina, el todoterreno invadió la acera para rebasarle por la izquierda y le golpeó su espejo retrovisor izquierdo, el semáforo en rojo a gran velocidad.
Asombrado y asustado por lo que acababa de suceder el conductor del vehículo golpeado se dirigió hacia las calles cercanas para intentar localizar el vehículo y tomarle los datos de la matrícula.
Cuando circulaba por calle Gravina giró hacia Churruca y tuvo que frenar bruscamente, ya que el conductor del todoterreno venía en dirección prohibida a toda velocidad. En ese instante dieron aviso a la Policía, bajándose el otro conductor de vehículo en medio de la calle al tiempo que salía a la carrera en dirección hacia la calle Urzáiz. Al realizar una comprobación de los datos del vehículo vieron que era el mismo que había estado implicado en una discusión de pareja de la calle Camelias momentos antes.
Había olvidado el teléfono en el coche
Al realizar una inspección del interior del vehículo comprobaron que pertenecía a la empresa de alquiler de vehículo, descubriendo bajo el asiento del acompañante un teléfono móvil.
Tras facilitar al resto de dotaciones en servicio la descripción del conductor implicado en el accidente se dio aviso a la grúa municipal para que trasladase el automóvil al Depósito Municipal de Vehículos.
Mientras esperaban su llegada sonó el teléfono móvil que habían localizado y al responder a la llamada el varón que llamaba manifestó ser el propietario del Smartphone, indicando que lo había perdido.
Minutos más tarde llegaba este varón en un taxi a la confluencia de Gran Vía con Urzáiz, y al ser interrogado por los agentes reconoció que era el conductor del todoterreno y que una hora antes había estado involucrado en una discusión con su expareja en la calle Camelias.
Por todo ello se lo detuvo y se le trasladó a dependencias policiales donde se realizó una comprobación de las bases de datos en la que se corroboró que el detenido contaba con cuatro antecedentes policiales anteriores.
El operativo fue llevado a cabo por la Brigada de Seguridad Ciudadana y la Policía Local de Vigo, pasando el detenido y todo lo actuado a disposición del Juzgado de Instrucción número 8 de los de Vigo y al Juzgado de Violencia Sobre la Mujer.