La investigación se inició debido al considerable incremento de los robos que se estaban produciendo durante los dos últimos meses (abril y marzo) en el interior de vehículos que se encontraban estacionados en garajes comunitarios en distintas localidades de la provincia de Pontevedra, concretamente en: Moaña, Cangas, Poio y Baiona, según informó la Comandancia de la Guardia Civil en un comunicado.
Los primeros robos se produjeron a mediados del mes de marzo en Poio, donde desvalijaron un total de 27 vehículos que se encontraban en varios garajes situados en diferentes calles del municipio. Una semana más tarde se produjeron otros 19 robos en siete garajes distintos situados en céntricas calles de la localidad de Moaña.
El mes de abril se producen, en dos fechas distintas, otras dos avalanchas de robos de similares características. La primera en Cangas, donde se registraron 22 robos en 12 garajes, en los que otros 25 resultaron con daños materiales. La segunda y última se registró la semana siguiente en Baiona, con 12 denuncias por la sustracción de efectos en el interior de otros tantos vehículos.
Las investigaciones realizadas conjuntamente por los Puestos Principales de la Guardia Civil de Cangas y Baiona-Nigrán fueron determinantes para llegar a la identidad y detención del presunto autor y reunir los indicios, suficientes para relacionarlo con todos los robos investigados, 105 en total.
Las pruebas indiciarias que llevaron a la identificación y detención del autor surgieron a raíz de las imágenes grabadas a través de las cámaras de video vigilancia de algunos garajes de la localidad de Cangas, de los testimonios obtenidos, que reconocen haber visto a esta persona en muchos de los garajes afectados y también de su peculiar forma de actuación.
Modus operandi
La Guardia Civil señala que «del análisis pormenorizado de los robos investigados cabe destacar, en primer lugar, que todos se cometieron durante los fines de semana o en vísperas de días festivos».
En segundo lugar, llamó especialmente la atención el meticuloso cuidado que tenía esta persona, que siempre actuaba solo, para la apertura de los vehículos tratando de causar el menor daño posible. La mayor parte de las veces fracturaba los cristales más pequeños de las ventanillas para luego acceder a los mandos de apertura de las puertas y en otras lo hacía mediante el apalancamiento de las lunas con un destornillador.
El objetivo primordial de los robos era el dinero en metálico que destinaba para satisfacer las necesidades que le ocasionaba su afición al juego, sin perjuicio de que en algunas ocasiones llegó a la sustracción de pequeños objetos que encontraba en el interior de los vehículos.
El supuesto autor de los hechos, que cuenta con un amplio historial delictivo, también por robos en interior de vehículos, fue detenido a primera hora de la mañana de ayer cuando salía de su domicilio en Vigo, acusado de un delito continuado de robo. Está previsto que este miércoles pase a disposición del Juzgado de Instrucción de guardia de Vigo.