No se sabe si sus experiencias personales le ayudaron a desarrollar este exitoso proyecto, pero la realidad es que este joven emprendedor nunca tuvo muy buena relación con sus distintos profesores, incluso más de uno llegó a insistirle para que dejara sus estudios y se dedicara a trabajar en McDonald’s.
En este sentido, no fue hasta los 15 años cuando Finman sacó todo su potencial comercial, y decidió invertir los 1.000 dólares que le había regalado su abuela por su cumpleaños en una casi nueva moneda virtual llamada Bitcoins. Según afirma la cadena norteamericana CNBC, Erik comenzó a vender sus bitcoins en el pasado 2013, y fue consiguiendo más monedas hasta lograr nada menos que 400 unidades, lo que al cambio actual equivaldría aproximadamente a un millón de dólares.
Ahora conociendo un poco más su historia, quizás sea más sencillo entender porqué su abuela opto por regalarle 1.000 dólares en metálico a un joven de 15 años, en lugar de cualquier obsequio original como alguno de estos, es decir, una cámara de fotos, una mochila, o incluso algún producto de Mac como suelen regalar los familiares: Finman definitivamente, no era un chico corriente.
Aunque al parecer el código genético también influye en el éxito de esta especial familia; ya que su hermano mayor fue un niño prodigio, el mediano estudió en Harvard, y ambos progenitores son ingenieros cuyos inventos son utilizados por el Ejército de los Estados Unidos.
Por otra parte, y al otro lado del charco, tampoco nos va tan mal educativamente hablando, recordar que hoy finaliza el plazo para el programa ‘Galileo Masters’ sobre navegación por satélite. Señalar que Galicia es socio principal de esta formación junto al Consorcio de la Zona Franca de Vigo en colaboración con la Universidad de Vigo, y los centros de investigación AtlantTIC y Campus do Mar. El concurso está organizado por la Agencia Espacial Europea y repartirá más de 1 millón de euros en premios. A veces no nos queda más remedio que pararnos a escuchar a los más grandes como Nelson Mandela: “La educación es el arma más poderosa que disponemos para cambiar el mundo”.