Esta peligrosa situación provocó la rápida intervención de los agentes, que pudieron alcanzarlo justo en el momento en el que quedó atrapado entre los carriles de ambas direcciones cuando pretendía cruzar la autopista.
Ante el evidente estado de desorientación que presentaba, el joven fue trasladado a una zona segura de la vía y una vez comprobados sus datos personales, de identidad y domicilio, se facilitó su desplazamiento hasta la carretera N-550, en las proximidades de Pontevedra.
A raíz de esta incidencia, la Guardia Civil, además de reiterar la prohibición de caminar por la autopista, apela “al sentido de la responsabilidad solidaria los demás usuarios de la vía para que avisen a los servicios de urgencias del 112 o a la Guardia Civil (062), cuando se encuentren o tengan conocimientos de incidencias de este tipo”.