Las de Prades se mantienen en el grupo que sigue la estela del Rocasa, intratable con pleno de victorias.El Canyamelar Valencia aguantó poco más de cinco minutos en el partido, el tiempo de concesión que dio Marisol Carratú a las de Vicent Nogués. En el 9:48, tras el tanto de Carlota Rubio que colocó el 9-4 en el marcador, la guardameta argentina echó el cerrojo a su portería. Las valencianas fueron incapaces de anotar hasta el 28:29, con un gol de Judith Gómez que colocó el 15-5 en el electrónico. La argentina desquició a las visitantes, quienes no cesaron en su empeño desde los extremos e intentando sorprender en el uno contra uno por la zona central.
Canyamelar tuvo el primer balón del partido y las de Nogués estrenaron el marcador desde el extremo derecho con gol de Sara Bravo. Fue el único instante en el que las valencianas fueron por delante de las gallegas. Urban respondió rápido en el 1-1 y tras unos minutos en los que se mantuvo la igualdad (Min.6, 3-3) el Guardés despegó. Con Carratú bajo palos, Espiñeira en el central, Mendoza y Hernández en los laterales, Egozkue y Urban en los extremos y Carla Gómez paseándose por los 6 metros el Mecalia fue anulando al conjunto valenciano.
Estefanía Descalzo lo intentaba todo para que su equipo funcionase, pero sin éxito. El balón no circulaba y cuando sus compañeras intentaban sorprender (Carlota Rubio buscando lanzamiento exterior o Sara Bravo en el cruce desde el lateral derecho) aparecía Carratú. Tampoco funcionaba la conexión con Herreros en el pivote, controlada por Hernández y Gómez.
Poco a poco, las de Prades, muy sólidas en defensa, fueron firmando con serenidad un parcial de 8-0 que rompió el partido por completo. Los dos técnicos aprovecharon varios tiempos muertos para dar indicaciones a las suyas, pero con menos éxito en el caso de las visitantes. A pesar de las diferencias abismales de la primera parte, el Guardés también cometió errores de lanzamiento, que le hubiesen permitido ampliar más su renta, una diferencia que manejaron sin problemas hasta firmar la victoria final. Los cambios en los dos conjuntos empezaron a llegar, pero sin duda las de Nogués acusaron más la ausencia de Nitsan Dunay, su referente ofensivo.
La descalificación de Egozkue por una acción sobre Mendía Ibáñez (quien no volvió a contar con minutos) o las exclusiones locales tampoco fueron aprovechadas por las visitantes. La diferencia al descanso (16-5) aseguraba la victoria para las locales, a pesar de que el Canyamelar funcionó mucho mejor durante el segundo tiempo, con más claridad. La mejoría visitante -anotaron 14 goles durante los 30 minutos que disputó Estela Carrera- no fue suficiente y las locales se apuntaron la quinta victoria del curso por 32-19.
La afición, incansable durante sesenta minutos, tuvo un cariñoso recibimiento a la extremo guardesa Laura Morais, a quien también dedicó cánticos al término del encuentro. Con este resultado positivo, el Guardés se sigue haciendo fuerte en casa, pero deberá cambiar la tendencia lejos de A Sangriña si quiere seguir peleando por revalidar el título de campeón. El próximo sábado, complicada salida a Elche.