Nadie se explica por qué razón se mantiene la prohibición de circular hasta la Rúa Doutor Marañón, cuando esa opción simplificaría significativamente el flujo de tráfico y resolvería esta situación que ahora comentamos. Además, eliminar esa prohibición evitaría que los vehículos se vieran obligados a descender hasta la calle Pi y Margall, lo cual constituye una gran incomodidad para los conductores, puesto que en muchos casos el trayecto o el cambio de sentido se simplificaría con rodear la manzana de edificios delimitada entre la Avenida de las Camelias, la Rúa Doutor Marañón, la Rúa Menéndez Pelayo y la Rúa Don Quijote.