En concreto, se trata de un incendio que se inició en Padróns -parroquia del Concello de Ponteareas- y que posteriormente se extendió hacia el norte afectando a los municipios de Mos, Pazos de Borbén, Fornelos de Montes, Redondela, Soutomaior, Pontecaldelas y Cotobade.
Afectó a un total de 8.877 hectáreas, de las que aproximadamente la mitad eran arboladas y la otra mitad rasas. Los daños forestales, cuantiosos, tienen gran trascendencia, por afectar a zonas donde la vegetación juega un importante papel de control de la erosión y mejora de la biodiversidad, además de su gran valor paisajístico.
El objetivo principal de esta actuación, que supone una inversión máxima de 1.500.000 euros, es disminuir el aporte de cenizas y arrastres contribuyendo al restablecimiento de la vegetación existente en la zona, así como garantizar el suministro de agua potable y evitar la proliferación de plagas y de procesos erosivos.
Por ello es necesario actuar contra la erosión y retirar de manera inmediata la madera quemada y los restos que impiden que la vegetación se regenere, hecho que reducirá al mismo tiempo el riesgo de ataque de plagas forestales sobre los árboles dañados, que podrían afectar al resto de la masa colindante no dañada por el incendio.
Con ese objetivo los trabajos de restauración contemplan tratamientos de la vegetación, mejora de las infraestructuras y la creación de discontinuidades en vaguadas.