“Es cierto que si sacamos estos dos puntos nos aseguramos como mínimo la segunda posición”, apunta el técnico del vigente campeón de Liga. Pero el petrerí se mantiene cauto al apuntar a cotas mayores: “Tenemos que pelear por ganar los seis puntos que aún tenemos en juego y ojalá que Bera Bera pinche… pero ya no dependemos de nosotras mismas”.
Y es que lo cierto es que a pesar de que el Guardés se mantuviese invicto hasta el final del campeonato doméstico, tan solo un fallo de las donostiarras podría permitir a las gallegas revalidar el hito de la pasada campaña.
La expedición guardesa se desplaza esta tarde hacia Santiago de Compostela, donde cogerá a última hora el vuelo con destino Gran Canaria. La única ausente entre las jugadoras de Prades es la primera línea Rebeca Castell. La castellonense ya no disputará ningún partido de los que restan tras detectar en su rodilla izquierda los problemas de su menisco interno.
El Guardés llega al vital partido contra el Rocasa Gran Canaria ACE tras un fin de semana atípico sin competición debido a los compromisos de las canarias, que disputaron el domingo el partido de vuelta de la final de la Challenge Cup contra el MKS Perla Lublin de Polonia (27-23, 22-22 en la ida). Las canarias, que conquistaron la Supercopa en septiembre, han compaginado en los últimos meses la Liga, con la Copa de la Reina y la competición europea haciendo mella en su estado físico.
Cansancio
“Todo apunta a que el Rocasa puede estar cansado de tanta competición, pero en estos dos-tres partidos que quedan todo el mundo se olvida de lo físico”, advierte Prades. Aún con muchos objetivos por alcanzar y con el propósito de despedir la temporada de la mejor manera posible “el aspecto motivacional y sentimental cobra más fuerza”.
Prades espera un partido competido: “Ellas vienen de un partido muy complicado contra el Lublin, jugaron a un muy buen nivel ante un rival que les puso las cosas difíciles; vienen de competir, así que seguro que están enchufadas, a pesar del cansancio del viaje”. Un desplazamiento de vuelta que se complicó más de lo normal y que, tras perder los primeros vuelos de regreso obligó a la plantilla a hacer noche en el aeropuerto de Barcelona y no poder llegar a casa hasta este martes.
El Guardés, que se impuso en la primera vuelta al Rocasa por 26-21, intentará vencer por primera vez en el feudo de las canarias, donde esta temporada solo han puntuado el Super Amara Bera Bera (30-33) y el Granollers (26-26).
En plano extradeportivo cabe destacar que la de este miércoles será la primera vez que un partido de balonmano femenino de la División de Honor se retransmita en directo por Teledeporte. Se espera un gran ambiente en el Pabellón Rita Hernández de Telde para presenciar un partido de máxima rivalidad y que la entidad canaria ha querido aprovechar para celebrar, tal y como ha anunciado esta tarde, el “Día del Aficionado” con entrada gratuita y como homenaje para la plantilla, que regresa a su casa tras lograr el subcampeonato en la Challenge Cup.