El tenista nórdico, de 21 años, ha conseguido bajar ya del puesto 400 de la ATP, algo que no pueden decir muchos jugadores de su juventud en un circuito que ve cómo la edad media de su top 100 sube cada vez más. El de Trondheim cuenta ya en su haber con cuatro títulos ITF Futures –categoría que ostenta el campeonato vigués- y coquetea ya con los torneos Challenger, siguiente nivel del tenis profesional.
Además, será especialmente interesante ver de cerca el juego del noruego, que será el cabeza de serie número tres si no hay variaciones en la próxima actualizacion de los rankings, porque suele prodigarse más por superficies duras que por tierra batida. Durasovic tendrá por delante a otros dos favoritos a alzarse con la victoria final, los catalanes Oriol Roca y Álvaro López San Martín. El primero acaba de hacer doblete en el ITF Futures de Xátiva y suma ya veinte títulos individuales. El segundo llega con ranking protegido debido a una lesión.
El evento contará con un claro toque internacional. Entre los tenistas que accederán de forma directa al cuadro principal, además de los españoles y el mencionado Durasovic, se encuentran tres franceses, dos bolivianos, un suizo, un ruso y un peruano. Una representación universal que se hará más patente todavía en la fase previa.
El ganador del torneo, que se disputa sobre polvo de ladrillo y cuenta con una dotación de premios de 15.000 dólares, sumará 18 puntos ATP y verá inscrito su nombre en la Copa Bedriñana junto a Rafa Nadal, Manolo Santana o Manuel Orantes, entre otros.