Los hechos se produjeron de madrugada, cuando una patrulla se trasladó a un edificio de la calle Camilo José Cela, donde un vecino había alertado de que tras percibir olor a quemado se había dado cuenta de que por la ventana de la cocina del sexto piso salía humo hacia el exterior.
La policía cursó el correspondiente aviso a bomberos y al mismo tiempo se desplazó a la vivienda. A su llegada, llamaron “insistentemente” a la puerta, pero no obtuvieron respuesta alguna.
En breve momentos se personó una dotación de bomberos que, ante el temor de que en vivienda se encontrasen personas en situación de peligro, tuvo que acceder al interior de la casa, donde se encontraba un hombre de 49 años en perfecto estado.
Según contó, se había quedado dormido mientras veía la televisión y por ese motivo no había escuchado las llamadas en su puerta.
El presunto incendio resultó ser la comida en el interior de una cazuela dejada al fuego, que se había quemado. Los únicos daños que se produjeron en el inmueble fueron los provocados por el humo.