«Nunca se debe apostar por volver a ese modelo del pelotazo y aquí quieren favorecer el negocio privado, no se justifica», señaló el viceportavoz parlamentario de En Marea, Antón Sánchez, que defendió este miércoles en la Cámara gallega la iniciativa para rechazar la modificación del Plan Xeral de Ordenación Municipal de Mos que ya fue aprobada en el pleno del Concello.
Sánchez añadió que «lo que se pretende, menos de un año después, es recalificar suelo, la mayoría de protección forestal y la mitad montes vecinales en mano común».
Por su parte, el socialista Abel Losada criticó que «la Xunta tiene un mecanismo de actuación sorprendente con Vigo, puesto que invita, pero luego la ciudad «paga». El diputado vigués explicó que «en este caso invitan la Xunta y el Ayuntamiento de Mos, el presidente de la Xunta y la alcaldesa. Los vecinos de Vigo pagan y el señor Mouriño cobra. Ese es el quid de la cuestión».
Losada añadió que existe una «alianza político electoral del presidente del Celta con el de la Xunta contra Abel Caballero y queda reflejado en que es mentira que el Celta no pueda construir en Vigo, lo que no podía era construir el pelotazo de un centro comercial».
Además, Luís Bará alertó del «contubernio entre PP, Celta y un un negocio privado, especulativo de piratería, es un despropósito, una carallada». El diputado del BNG se mostró «radicalmente en contra de este proyecto y comprometió todas las fuerzas de los nacionalistas para impedir que se lleve a cabo».
Por su parte, el diputado «popular» Alberto Pazos aseguró que el Plan Xeral de Vigo fue «tumbado legalmente y los grupos intentan engañar a los vecinos de Mos». Pazos añadió que Mos «fue capaz de ofrecer al club lo que Vigo no fue capaz por incompetencia de Abel Caballero».