Tan solo tres puntos separan al Hotel Gran Bilbao-Prosetecnisa Zuazo de la zona de descenso, que ocupan Castellón con 3 puntos, Helvetia Alcobendas con 5 y Morvedre con 6. Marcando la permanencia se encuentra el CH Canyamelar Valencia con siete. Y, aunque sobre el papel, el Mecalia parece estar lejos del Zuazo, Prades señala que “quizá la clasificación no refleja todo el potencial del conjunto, pero son situaciones que depara el deporte”.
Para frenar al conjunto zuazotarra, con una trayectoria muy irregular, Prades podrá contar con la plantilla al completo a excepción de la pivote Sarah Valero. En la pista, se prestará especial atención a jugadoras destacadas como las internacionales Ainhoa Hernández (pivote) o la extremo zurda Paula Valdivia. La ausencia destacada será la de la lesionada Amaia González de Garibay. Esta carta de presentación, unida al varapalo de la eliminación copera, dibujan un escenario incierto: “No espero un partido fácil”, adelanta Prades.
“Está claro que en los últimos minutos tienen problemas de gestión”, explica el entrenador del Guardés, “ya que van siempre por delante y al final…”, aclara. Consciente de que poco a poco las jugadoras de Joseba Rodríguez empezarán a coger galones y experiencia, Prades desea “que no sea mañana cuando tengan mayor control del juego al final del partido”.
La salida a San Sebastián, clave
Las de Prades deberán emplearse al cien por cien para evitar cualquier tipo de sobresalto innecesario. Este sábado, el conjunto gallego afrontará la primera de las doce batallas que restan en su particular ‘reconquista’ del título liguero ganado en 2017 y que el año pasado cedió al Super Amara Bera Bera. Y, precisamente, la siguiente salida para el Mecalia será para visitar a las vigentes campeonas.
La victoria cosechada en Valencia (18-37) permitió al Guardés arrancar la segunda vuelta sumando dos puntos necesarios para llegar a unas jornadas clave en la lucha por el título con las opciones intactas. De esta lucha que protagonizan donostiarras, canarias y gallegas no se descuelgan tampoco las ilicitanas del Elche Mustang ni las jugadoras del KH-7 Bm. Granollers.
Así, el próximo viernes 22 de febrero habrá duelo de altura entre el Super Amara Bera Bera y el Me- calia Atl. Guardés (21 h, Pol. Bidebieta). A día de hoy, el equipo del Baixo Miño es tercero con 21 puntos. Super Amara Bera Bera marca el liderato con 23, los mismos que el Rocasa Gran Canaria ACE. Donostiarras y canarias comparten registros similares con 11 victorias, un empate y dos derrotas. Por detrás, las de Prades con una derrota más (la más reciente en Elche por 23-22 y anteriormente en Canarias por 27-26 y Gijón por 32-29). A favor de las gallegas, la victoria por cuatro goles al Bera Bera en la primera vuelta y que recibe a Rocasa y Elche en casa. En contra, la salida a Granollers.
Ya en marzo, Alcobendas será el primer conjunto que visite A Guarda (2/03, 18 horas). Posteriormente, el Mecalia viajará a Málaga para medirse a un Rincón Fertilidad hundido tras alcanzar el liderato en la jornada 9 y que ahora navega por la zona media de la clasificación (octavas con 16 puntos) y se mantiene con vida en la Challenge Cup.
Tras el viaje a la Costa del Sol, el Mecalia Atl. Guardés volverá a recibir la visita de uno de los conjuntos más débiles de la categoría: el Club Balonmano Morvedre (16 de marzo a las 18 horas). Tras un descanso en la Liga Guerreras Iberdrola por compromisos internacionales de las Guerreras, marzo se cerrará con el partido en casa contra el Liberbank Gijón (30 de marzo a las 20 horas).
Abril será un mes casi de transición para el equipo de Prades, ya que con las vacaciones de Semana Santa y el parón en la competición doméstica por la celebración de la fase final de la XL Copa de S.M la Reina los días 26, 27 y 28 de abril en Barakaldo, solo habrá dos compromisos en la agenda guardesa: la visita al Castellón y el duelo directo contra el Rocasa Gran Canaria ACE -ambos aún sin fecha confirmada-.
El arreón final llegará en mayo con la visita al Aula Alimentos de Valladolid, el derbi gallego contra el Godoy Maceira Porriño, la complicada salida a tierras vallesanas para medirse al KH-7 Bm. Granollers de Robert Cuesta y con el cierre de la competición recibiendo en A Sangriña el verdugo copero: el Elche Mustang de Joaquín Rocamora.