Los hechos sucedieron este martes en el transcurso de un control selectivo de los vehículos que circulaban por la AP-9, en el que participaron efectivos de la Patrulla de Fiscal y Fronteras y la de Seguridad Ciudadana de la Compañía de Vigo.
En uno de los vehículos inspeccionados, un camión conducido por un vecino de Ribeira (A Coruña), de 33 años, la Guardia Civil pudo comprobar que transportaba productos de la pesca y entre ellos un lote de 40 cajas de plástico que contenían 384 kilos de merluza. Las cajas carecían del etiquetado propio de estos casos y la merluza no iba amparada por el preceptivo documento de acompañamiento.
Los hechos se pusieron en conocimiento de la Delegación Territorial de la Consellería de Sanidade de Pontevedra y se procedió al precinto de la mercancía que continúo la ruta que tenía prevista hasta su destino en el muelle en el muelle de Ribeira (A Coruña), donde pasaría a disposición de las autoridades sanitarias competentes en la materia.
En el marco del mismo dispositivo se interceptó un turismo, conducido por un vecino de Barcelona, que transportaba 386 puros de importación en el maletero sin la documentación que debería amparar su circulación y tenencia. La Patrulla Fiscal procedió a la aprehensión y depósito de los puros en los almacenes de Logística de Pontevedra y levantó la correspondiente acta por una infracción de contrabando, que se remitió a la Administración de Aduanas e Impuestos Especiales de esta ciudad.