El sector educativo es muy amplio, puesto que existen profesionales de esta área que puede impartir clases en diferentes cursos. De esta forma, los hay expertos en la Educación Secundaria y Bachillerato, otros que prefieren dedicarse en exclusiva a la Primaria o incluso aquellos que imparten sus conocimientos en los cursos de Formación Profesional.
En cualquiera de los casos, se debe contar con la titulación correspondiente para poder ejercer esta profesión, además de, en la medida de lo posible, tener formación adicional para ampliar todos esos conocimientos.
En este sentido, cursar un master educacion es una fantástica opción para aquellos que quieren ser profesores en el futuro. Hay que tener en cuenta que estos másteres son necesarios a la hora de orientar la actividad laboral en el sector de la enseñanza, de ahí la importancia de escoger un buen centro para cursarlo.
¿Por qué cursar un máster en educación?
Lo primero que se debe tener en cuenta cuando se decide cursar un máster de este tipo, es que va a ser una herramienta esencial para poder realizar la enseñanza de una manera adecuada. No hay que olvidar que en la educación, interviene un gran número de factores para que el resultado final sea óptimo.
De esta manera, a la hora de educar no solo es importante conocer a fondo qué es lo que se enseña, sino también la forma en la que se hace, es decir, el cómo se enseña el contenido aprendido. Es aquí donde cobra protagonismo el máster, puesto que no solo ayuda a ampliar los conocimientos, también es ideal para aprender nuevas técnicas a la hora del proceso de aprendizaje.
¿Es obligatorio estudiar un máster en educación?
Dependiendo de la carrera que se haya estudiado, un máster en educación podrá ser obligatorio o no. Si bien es cierto, en todos los casos es más que necesario tenerlo precisamente, para desarrollar esas aptitudes que se mencionan anteriormente.
Para hacerse una idea, en España para ser profesor, hay que estar en posesión de un título universitario. Ahora bien, los hay específicos de educación, como es el caso del Grado en Educación Infantil o de Primaria. Asimismo, se requiere titulación universitaria (que no tiene que ser de la rama de educación obligatoriamente) para impartir clases en cursos superiores como la ESO o Bachillerato.
Es importante comentar que, antes de que llegara el Plan Bolonia, aquellos que querían ejercer como profesores de estos cursos más altos, debían tener el Certificado de Aptitud Pedagógica, conocido popularmente como CAP. Sin embargo, con el cambio en el sistema educativo y la llegada de este plan, es necesario contar con un máster en educación para la correcta formación del profesorado.
Por este motivo, a la hora de apuntarse a este máster u otros cursos formativos, es fundamental que se conozca la diferencia existente entre maestro y profesor.
¿Cuáles son las principales diferencias?
Para diferenciar un maestro de un profesor, lo primero que se debe tener en cuenta es la titulación. Como se ha comentado, hasta la educación primaria los maestros son los que se encargan de impartir las clases, mientras que para los cursos superiores, son los profesores.
Los maestros pueden presentarse a las oposiciones trabajar en un centro sin el máster, mientras que para los profesores es obligatorio. Por tanto, hay que decir que los maestros se encargan de educar a los niños entre 3 y 12 años, mientras que los profesores trabajan con jóvenes de entre 12 y 18.
Otra de las diferencias a destacar es el tipo de centro en el que desarrollan su actividad. Los maestros suelen educar en los colegios y, los profesores, lo hacen normalmente en institutos. Asimismo, en cuanto a los horarios, habitualmente los profesores solo trabajan por la mañana, mientras que los maestros tienen horario partido, aunque es cierto que cada vez más los centros apuestan por las jornadas intensivas.
Y finalmente, hay que diferenciar sus sueldos. Los profesores pertenecen al grupo A y los maestros al B. Los salarios que percibe cada grupo depende de cada Comunidad Autónoma, aunque si se hace una media, el grupo A puede percibir alrededor de 31.000 euros anuales en 14 paga, mientras que el grupo B roza los 28.000, aproximadamente.
Para ser profesor de secundaria y bachillerato ¿qué tipo de máster se cursa?
Habitualmente, el máster en educación para los que quieren ser profesores de secundaria y bachillerato cuenta con varios módulos de enseñanza. El primero suele ser genérico, donde se enseña aspectos globales; luego está el específico, que corresponde a cada especialidad que se quiera cursar; y finalmente el prácticum, con prácticas docentes obligatorias en centros de secundaria y realizar un trabajo final. También es común añadir contenidos complementarios en algunas áreas.
El objetivo de este máster es hacer que los alumnos adquieran las competencias profesionales necesarias para ser profesores. Es decir, saber realizar una planificación, conocer los procesos de evaluación, concretar el currículo de cada materia, desarrollar aptitudes para llevar a cabo funciones de orientación o tutoría y conocer los nuevos procesos de enseñanza, entre otras cosas.
¿Y para ser profesor de FP?
Al igual que ocurre para secundaria y bachillerato, para ser profesor de FP se requiere el título de Máster de Formación del Profesorado, para poder impartir clases tanto en centros públicos como privados.
Asimismo, otros requisitos indispensables son tener más de 18 años, se residente en alguno de los países de la Unión Europea, contar con el título de una carrera universitaria, ya sea licenciatura, grado o ingeniería, que esté relacionada con la especialidad que se vaya a impartir como profesor de un ciclo formativo.
Y en el caso de querer dar clases sin carrera, para ser profesor se debe tener un FP Superior, así como el Certificado Oficial de Formación Pedagógica y Didáctica para Profesorado de Formación Profesional.