Sólo el 2% de los habitantes de Vigo y el resto de la provincia de Pontevedra han generado anticuerpos frente al SARS-Cov2. Así lo concluye la segunda oleada del estudio impulsado por el Ministerio de Sanidad y coordinado por el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII). Esta tasa es muy similar a la que arrojó la primera ronda, que se situaba en un 2,3%. Esta nueva tanda de pruebas se ha realizado entre el 18 de mayo y el 1 de junio.
La tasa que presenta el conjunto de Pontevedra es la más baja de Galicia, por detrás de A Coruña y Ourense (2,2%) y Lugo (2,5%). Y sobre todo es muy inferior al resultado global en España, donde más del 5% de la población ha desarrollado inmunidad frente al virus que provoca la COVID-19, una tasa ligeramente inferior en hombres (5,01%) que en mujeres (5,40%). En relación con la edad, la presencia del anticuerpo IgG es menor en bebés, niños y jóvenes y existen moderadas diferencias entre el resto de grupos poblacionales de más edad.
Los datos, además, vuelven a ser diferentes a los del estudio que desarrolló por su cuenta la Xunta de Galicia, que en su primera oleada situó en un 1,64% la cifra de habitantes con anticuerpos en el área sanitaria de Vigo, en un 1,49 en el conjunto de la provincia y un 1,15 en toda Galicia. La Consellería de Sanidade tiene previsto iniciar la segunda ronda de test a finales de la próxima semana.
Aunque la media nacional es de un 5,21%, el estudio arroja una marcada variabilidad geográfica, también muy similar a la observada en la primera ronda, con prevalencias iguales o próximas al 10% tanto en Madrid como en las provincias situadas en su entorno.
En relación al tamaño de los municipios, existe un leve incremento de esta tasa de inmunidad respecto a la primera oleada en las grandes ciudades (más de 100.000 habitantes) que han pasado de un 6,4% a un 6,8%.
El 80,5% de los participantes en el estudio que declaran haber dado positivo por coronavirus en un diagnóstico por PCR hace más de dos semanas presentan anticuerpos IgG. En los casos sospechosos, la prevalencia de este anticuerpo aumenta con el número de síntomas y es particularmente alta en las personas que han sufrido pérdida de olfato (40%). En el caso de los participantes asintomáticos, a un 2,8% se les detectó anticuerpos IgG.
Existe un 0,8% de participantes que siendo negativos en anticuerpos en la primera ronda han seroconvertido en esta segunda, es decir, se les ha detectado la presencia de IgG de la que antes carecían. Destacan los casos de Ávila, Valladolid y Palencia, con valores cercanos al 2%, y los de Madrid, Soria y Segovia con un 1,5%.
Finalmente, el mapa de posibles casos con síntomas de COVID-19 en las últimas dos semanas muestra, en general, prevalencias inferiores a las de la primera ronda. Solo las provincias de Santa Cruz de Tenerife, Granada, Madrid, Toledo y Las Palmas están en torno al 1%. Los posibles casos con síntomas de COVID-19 se refiere a personas con tres o más síntomas o con pérdida súbita de olfato.
Resultado provisional
A las personas que han participado en el estudio se les ha realizado una encuesta epidemiológica sobre COVID-19, un test rápido de inmunocromatografía y, a quienes accedieron, una extracción de sangre para determinar los anticuerpos IgG mediante inmunoensayo.
La combinación de ambas técnicas permite maximizar la representatividad y la calidad de la información, por lo que los resultados de estos informes preliminares son provisionales hasta la incorporación de los resultados obtenidos mediante inmunoensayo.
La inmunoglobulina G (IgG) es el tipo de anticuerpo que más abunda en el cuerpo. Se encuentra en la sangre y en otros fluidos, y brinda protección contra las infecciones bacterianas y víricas. Los especialistas pueden evaluar las concentraciones de inmunoglobulina en sangre para saber si una persona tiene una infección o si está protegida contra ella (es inmune a ella).
Representación
En esta segunda ronda del estudio ENE-Covid-19 han participado 63.564 personas, una cifra superior a la de la primera oleada en la que colaboraron 60.983. Además, ha existido una alta adherencia ya que el 95% de los participantes en la primera oleada han aceptado participar en la segunda.
La tasa de participación entre los individuos elegibles también ha mejorado a la de la primera ronda con un 66,5% frente al 63,7% del periodo anterior. Si se considera solo a las personas que han podido ser contactadas, la cifra de participación alcanza el 76,1%, dos puntos más que en la ronda anterior.
El objetivo del ENE-Covid19 es estimar la prevalencia en España de la infección por SARS-Cov2 mediante el estudio de la presencia de anticuerpos frente a este virus, causante de la enfermedad.