Ya quedan pocas fechas para que comencemos a pelar el pavo, cocinarlo y ponerlo en la mesa el día 25. Pero a los españoles la incertidumbre nos embarga. La pandemia nuestra de 2020 nos envuelve y nos deja el futuro inmediato rodeado de un manto espeso de neblina.
Las familias se preguntan: ¿cómo van a ser este año las Navidades?, ¿cuántos vamos a ser?, ¿los familiares que están lejos podrán venir para pasarlas todos juntos? Pues, queridos ciudadanos, no son preguntas sencillas. Y nuestros políticos no nos lo ponen fácil.
Porque no hace mucho el ministro Illa ha hablado de poder juntar a diez personas entre familiares y «allegados». Este término ha despistado mucho al personal porque ¿qué se entiende por allegado? Pues según el diccionario de la RAE es la «persona cercana a otra en parentesco, amistad, trato o confianza». Según esta definición, nos quedamos un poco como estábamos.
Al momento nuestro avezado ministro sanitario ha salido al quite para aclararlo. El hombre aseguró que el vocablo se refería a aquellos con los que se siente «una afectividad especial». Y al oirlo ya nos quedamos todos mucho más tranquilos.
Y es que esa «afectividad especial» puede ser positiva o negativa. Afectividad «especial» (no muy positiva) la tienes con tu expareja, a quien no veo yo siendo invitado/a al convite. ¿Y una amante ocasional es o no es? ¿Y un amigo que hace veinte años que no ves? ¿Y un cuñado pesadito? Yo me veo en un mar de dudas.
Pero es que si escuchamos al autonómico presidente Feijóo su discurso no tiene nada que ver, ya que él habla de que en Galicia nos vamos a regir por «unidades familiares».
Yo creo que ahora ya me estoy aclarando mucho más, así es muy sencillo. Vd. podrá juntar dos (no más) «unidades familiares» en la comida de Navidad, siendo:
(1 Unidad Familiar = X personas convivientes en un mismo domicilio), teniendo en cuenta que los niños menores de no sé qué edad no computarán en la suma de diez asistentes.
Pero, ¿y si un hijo estudia fuera, podría asistir a la comida? Porque sólo pertenecería a la unidad familiar de forma temporal en vacaciones. Pero si por esta vía pudiera quedar excluido quizá (invocando la norma no gallega) lo podríamos recuperar por «allegado», o siendo en Galicia por «acheghado».
Y rizando un poco el rizo, si Vd. vive en la frontera entre Galicia y Zamora, por ejemplo, ¿podríamos juntar los dos criterios y meter en el comedor? ¿2 unidades familiares gallegas + 10 familiares-allegados castellanos y juntarnos el ciento y la madre y que le vayan dando al Covid?
Lamento profundamente no poderles aclarar un poco más el tema. Yo en último caso llamaré al Dr. Simón. Y si no contesta, al ministro Illa, que no tiene cara de mucha celebración.