Piscinazos con garantía VAR, razón en Mestalla. Desde ahora, los futbolistas -suponemos que los de equipos «grandes»- pueden lanzarse al césped sin ningún tipo de problema. Ya se ocupan los árbitros de buscar una imagen en la que se genere la mínima duda para expulsar al rival. Les sonará raro, pero así tal cual sucedió este sábado en el choque entre Valencia y Celta.
Un partido soso y aburrido, sin nada que destacar y que tendría que acabar en empate sin goles, se volvió loco con la nueva norma inventada por el colegiado y sus asistentes de vídeoarbitraje. El Celta acabó apaleado y sin premio tras dos goles en Valencia en el descuento.
En Mestalla, donde acostumbran a lamentarse por los «robos» que padecen, este sábado callarán. Y es que tanto Celta como Valencia ofrecieron un choque con una marcha menos y ritmo lento, parsimonioso, sin apenas profundidad. Los locales, con el descenso a solo tres puntos, les pesó la tabla clasificatoria y no quisieron arriesgar. Los visitantes, con sus dos importantes ausencias (Aspas y Brais por sanción), también contemporizaron. El resultado, mucho miedo y poco fútbol. Un tostón.
Dominó el Celta y cargó más por la derecha, con salida de balón a cargo de Araújo y Mallo lanzando a Solari. El primer susto fue a cargo de un excéltico, el danés Wass, que empalmó a la red desde la frontal, pero en posición de fuera de juego. Con el tiempo casi cumplido el Celta tuvo la suya, aunque Denis erró en el último pase a Nolito cuando el gaditano ya armaba su pierna derecha.
La segunda parte discurría con el mismo aburrimiento hasta que llegó la jugada clave. Un piscinazo de Maxi a la salida de Rubén Blanco acabó con la expulsión del portero tras cinco minutos de revisión. El colegiado no había visto nada punible, como así fue, pero el VAR buscó el «frame» televisivo en el que supuestamente roza al uruguayo. A la calle.
El choque cambió drásticamente. Quedaban 20 minutos, el Chacho retiró a Ferreyra por Iván Villar y Mina se quedó solo en punta para pelear. La misión era salvar un punto. Los últimos minutos fueron un asedio permanente, aunque el Celta también pudo marcar en una buena contra con Mallo pisando área pequeña.
Pero fue tanto el cántaro que se acabó rompiendo. Manu Vallejo marcó en el descuento con el Celta encerrado y Gameiro remató la faena. Próxima parada, el domingo que viene en Balaídos (14:00 horas) ante el Valladolid.
Valencia: Cillessen, Correia, Paulista, Soler, Gaya, Guillamón, Blanco (min.70, Gameiro), Wass, Racic (min.81, Manue Vallejo), Kang In y Maxi Gómez.
Celta: Rubén Blanco; Hugo Mallo, Araújo, Murillo, Aarón; Tapia; Denis Suárez, Nolito (min.90, Beltrán), Solari (min.81, Aidoo); Mina y Ferreyra (min.66, Iván Villar).
Goles: 1-0, min.90+1: Manu Vallejo; 2-0, min.90+4: Gameiro.
Árbitro: Pizarro Gómez (Comité Madrileño). Mostró roja directa a Rubén Blanco y Vlado Gudelj. Amarillas a Nolito, Mina, Tapia, Kang In y Gayá.
Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 24 de La Liga disputado en el Estadio de Mestalla.