Tiene 43 metros de eslora, puede alcanzar una velocidad de 23 nudos y una autonomía de más de 2.000 millas náuticas. Es la patrullera de fibra de vidrio más grande de Europa, la que dispone de mayor tecnología para la lucha contra el narcotráfico, se llama «Cóndor» y ha sido construida en la ría de Vigo para Aduanas. Su objetivo es dar servicio a las bases en patrulla costera cubriendo amplias zonas del litoral. Además, también ofrecerá capacidad para operaciones oceánicas.
El astillero Rodman Polyships entregó este jueves a Vigilancia Aduanera la embarcación más moderna que existe actualmente en aguas europeas para combatir el tráfico de drogas. La base de la patrullera de Aduanas será itinerante (en Vigo ya presta servicio el «Halcón») y acudirá al lugar en el que sea precisa. De entrada, su puesta a punto se llevará a cabo en la ría para facilitar la cercanía con el astillero.
La puesta en funcionamiento del patrullero «Cóndor» supone la introducción de un nuevo segmento de embarcación en la flota del Servicio de Vigilancia Aduanera. Se trata de un buque adecuado tanto para cumplir labores de control del litoral de una o varias regiones, como para realizar misiones de corto y medio alcance en alta mar. Ha supuesto una inversión de 8,2 millones de euros y tiene capacidad para llevar a bordo a un máximo de 22 personas (14 tripulantes, 4 invitados y 4 detenidos).
«Made in Rodman»
La embarcación fue amadrinada este jueves en las instalaciones de Rodman en Latón (Moaña) por la secretaria de Estado de Hacienda, Inés Bardón. El acto inaugural contó con la presencia del director general de la Agencia Tributaria, Jesús Gascón, y el delegado del Gobierno en Galicia, José Manuel Miñones. También asistieron a la entrega de la patrullera representantes del Departamento de Aduanas y de la Delegación Especial de la AEAT en Galicia, así como los alcaldes de Vigo y Moaña, el delegado del Consorcio de la Zona Franca y autoridades autonómicas y locales, así como de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado.
El «Cóndor» toma su nombre de los años 80 y 90, cuando bajo esta denominación una serie de patrulleros camuflados realizaban su servicio para Vigilancia Aduanera en un periodo especialmente intenso de la lucha contra el narcotráfico en España.
Este nuevo patrullero cuenta ya con los más modernos medios de navegación y comunicaciones. Estará dotado de un sistema optrónico de última generación para la detección y seguimiento de embarcaciones, así como de un sistema específico de comunicaciones securizadas. Dos embarcaciones auxiliares transportarán desde el buque a las tripulaciones de presa hasta los puntos de abordaje.
Labor de asistencia en el mar
De igual forma, ante las situaciones de emergencia humanitaria que se viven en las costas españolas, el ‘Cóndor’ cuenta a bordo con un sistema de recogida de náufragos que incluye la instalación de zonas de recogida cercanas al nivel del agua para facilitar el rescate.
También se ha incorporado al buque un potente cañón de agua contraincendios para apoyar a otras embarcaciones en caso de que sufran un siniestro en el mar.
La flota de Vigilancia Aduanera
Con la llegada del ‘Cóndor’, la flota del Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria pasa a contar con un total de 47 embarcaciones. Dispone de los buques de operaciones especiales ‘Petrel’ y ‘Fulmar’, de 72,5 y 61 metros de eslora. Ahora tiene el nuevo patrullero de altura polivalente con sus 43 metros, los patrulleros de 32 metros y las interceptadoras de 17 metros. También lanchas de asistencia y apoyo semirrígidas y similares.
Sus 25 bases marítimas y seis áreas se coordinan en Madrid por el Centro de Coordinación Operativa Permanente con el apoyo de las Oficinas de Inteligencia Marítima. La flota ha realizado más de 2.300 reconocimientos de embarcaciones anuales, con más de 250.000 millas navegadas cada año.
Su papel ha resultado clave en grandes operaciones contra el narcotráfico desde hace décadas. Tomando como referencia el periodo más reciente, solo desde comienzos de 2019 hasta la fecha ha realizado 140 actuaciones. Su resultado: 19 toneladas de cocaína y más de 200 de hachís aprehendidas.