La abonada número uno del Celta, Alicia Barreiro, realizó el saque de honor del partido de este domingo contra el Sevilla, como acto de homenaje a todos los aficionados celestes tras 603 días sin que Balaídos contase con el cien por cien de su aforo.
La veterana socia, cogida del brazo del capitán celeste Hugo Mallo, realizó el saque de honor, con los cerca de 11.000 aficionados puestos de pie para aplaudir a Barreiro.
Además, se guardó un minuto de silencio en memoria de los ex jugadores del Celta Joaquín Álvarez y Pedro Taberner, así como de los abonados históricos Álvaro Viéitez y Joaquín Núñez.