La Xunta ha dado un vuelco a su discurso sobre la retirada de las mascarillas en los patios de los centros educativos. El conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, aseguró hace dos días que ese asunto no era objeto de debate en Galicia. Sin embargo, el vicepresidente primero, Alfonso Rueda, ha apoyado la medida este jueves, después de conocer el anuncio de la Comunidad de Madrid. Su presidenta, Isabel Díaz Ayuso, ha revelado que ese uso dejará de ser obligatorio en la región a partir del lunes.
Rueda, que sustituyó a Núñez Feijóo tras el Consello da Xunta por motivos de agenda, ha declarado que la decisión “tiene dos partes”. Por un lado, debe ser analizada legalmente y, por otro, debe ser avalada desde un punto de vista sanitario. El representante autonómico, que dio a conocer las últimas decisiones tomadas por los expertos que asesoran a la Xunta durante la pandemia, afirmó que lo primero será comprobar que la medida tiene “viabilidad jurídica”.
En caso de ser así, “se le plantearía al subcomité clínico”, órgano que pasará a tomar las principales decisiones epidemiológicas ahora que se ha declarado el fin de la emergencia sanitaria. Si sus integrantes dan el visto bueno, la propuesta se aprobaría. “Si hay esas dos viabilidades, esa medida será implantada en Galicia”, sostuvo Rueda.
La retirada de las mascarillas en los patios supondría un nuevo paso hacia la normalidad. Además, adecuaría la situación en los centros educativos a la que se vive en la calle, con la salvedad de que los menores de 12 años todavía no están vacunados contra la Covid-19. En el camino hacia dicha normalidad, la Xunta anunció este jueves varios cambios en la normativa sanitaria. El principal, que se pone fin a las restricciones sobre los aforos en todos los espacios y actividades, regresando así a una situación prepandémica.
Lo que no vuelve al escenario previo a marzo de 2020 son los horarios en la hostelería y el ocio nocturno. Cafeterías, bares, mesones o restaurantes ganarán algo de actividad pero solo podrán abrir hasta las 01.30 horas dos noches a la semana: del viernes al sábado y del sábado al domingo. Es decir, media hora más cada uno de esos días.
El ocio nocturno también ampliará su horario. En el caso de pubs y salas de conciertos, el cierre se instaura a las 04.30 horas esas dos noches. Mientras, las discotecas y salas de fiestas podrán abrir hasta las 05.00 horas durante toda la semana (ahora lo hacían hasta las 04.00 horas). En este ámbito, seguirá estando vigente el uso del ‘certificado covid’.