Las delegaciones de Vigo, Ourense y Pontevedra del Colegio de Arquitectos de Galicia han fallado los premios Gran de Area de Aportación á Arquitectura 2021. Estas distinciones son un reconocimiento al trabajo conjunto y necesario de todos los agentes – arquitectos, promotores, aparejadores, constructores y otros colaboradores como los artesanos- que participan en el proceso de concebir y construir una obra de arquitectura de calidad desarrollada. El propósito del concurso, circunscrito a las demarcaciones de Vigo, Ourense y Pontevedra, es resaltar el valor de la obra arquitectónica, una “pequeña pero importante contribución a la arquitectura, a la creación y a la puesta en valor del entorno”.
Tras horas de “intensas deliberaciones”, el jurado seleccionó trece obras (seis de la delegación de Vigo, cuatro de Ourense y tres de Pontevedra). Entre ellas se encuentran cuatro intervenciones en inmuebles situados en la ciudad olívica, como la promoción de vivienda pública impulsada por la Xunta de Galicia en la calle Ignacio Grobas, donde se construyeron 36 pisos. También la rehabilitación de un edificio unifamiliar entre medianeras en la calle Ferreiros, de un domicilio en la calle Lepanto y de un apartamento “en el centro de Vigo”.
Igualmente, fueron galardonados los proyectos ‘Oficinas efímeras’ en Tui y ‘Espacio expositivo para dibujos de presos de la Guerra Civil española’ en el Mosteiro de Oia. El acto de entrega de diplomas se celebrará el 10 de diciembre en Vigo, y en esta ocasión será especial porque también reunirá a los ganadores de la pasada edición (evento que no pudo celebrarse en 2020 debido a la pandemia).
Este año se presentaron 70 proyectos de muy distintas escalas y ubicaciones, que son el resultado que aglutina lo mejor de los arquitectos, pero también de todos los agentes de obra que los acompañan en el proceso constructivo: topógrafos, promotores, ingenieros, constructores e incluso artesanos de la madera o el metal.
El jurado destacó la “calidad” de todas las nominaciones presentadas. “Estos premios son muy especiales e importantes porque reflejan el buen hacer cotidiano de los arquitectos gallegos, profesionales cuyo trabajo transforma y regenera el territorio donde vivimos, y mejora la calidad de vida de las personas, además de mostrar la necesaria confianza de los clientes para obtener un resultado de calidad”, indica la organización del certamen.
Asimismo, se valoró la totalidad de los proyectos presentados y los aspectos concretos que aportan un carácter o valor singular por su tipología, innovación tecnológica, bajo coste o integración en el territorio. El jurado estuvo compuesto por los presidentes de las delegaciones de Vigo, Ourense y Pontevedra del Colegio de Arquitectos de Galicia, Manuel Martínez Carazo, Rafael Castro Armesto y Anselmo Villanueva Peón, respectivamente; un miembro de cada delegación seleccionado por su Junta Directiva: Xabier Pousa por Vigo, Roi Feijoo por Ourense y Luciano González por Pontevedra; el arquitecto Santos Vila, colegiado seleccionado entre los premiados de ediciones anteriores; y la tesorera de la delegación de Vigo, Sonia Alvarado, que actuó como secretaria del acto.
Los premios Gran de Area nacieron en Vigo en 2001 para poner en valor y contribuir a la armonía entre arquitecto y promotor, para conseguir el mejor resultado arquitectónico y constructivo posible, convirtiéndose en la mayor apuesta e impulso del reconocimiento social de esta disciplina.