Muchas personas sienten que no descansan lo suficiente por las noches. El insomnio, unido a situaciones de estrés y nerviosismo, pueden impedir que una persona duerma el número de horas necesarias para levantarse al día siguiente con toda la energía para afrontar los retos de un nuevo día.
Encontrar soluciones para descansar de forma correcta es el deseo de muchas personas que padecen este tipo de situaciones. Si bien no existen soluciones mágicas, lo cierto es que algunos hábitos que podemos introducir en nuestro día a día pueden ayudarnos mucho a descansar mejor durante las noches.
Pero ¿qué debes hacer para descansar mejor?
Entre los principales hábitos que debes adoptar para mejorar tu descanso se encuentran los siguientes:
Usar ropa cómoda y confortable
Después de un duro día de trabajo donde a veces utilizamos ropas y vestimentas que nos hacen sentir incómodos es muy recomendable utilizar ropa de estar en casa. La ropa de estar en casa o homewear son prendas ligeras, suaves, que no aprietan y que nos hacen sentir cómodos y relajados. El efecto que esto tiene sobre la capacidad de relajarse y desconectar para luego conciliar mejor el sueño es cada vez más estudiado por los científicos.
Desconectar de la tecnología
Está demostrado que el uso de la tecnología, como el móvil o la tablet, justo antes de irse a dormir influyen negativamente a la hora de conciliar el sueño. La luz blanca intensa que emiten estas pantallas mandan al cerebro el mensaje de que es de día y con ello se reduce la producción de melatonina de forma natural, una hormona que influye en el sueño. Por lo tanto, al menos una hora de antes de irse a dormir debemos desconectar de cualquier pantalla.
Cenar ligero
Una de las claves para conciliar el sueño y descansar de forma más relajada es cenar ligero. Las cenas copiosas originan digestiones mucho más pesadas que hacen que nuestro organismo se mantenga activo. Esto dificulta el sueño y la capacidad del cuerpo para relajarse. Lo recomendable, tanto a nivel nutricional como para favorecer el descanso, es cenar ligero y no abusar de alimentos grasos y azúcares antes de irse a dormir.
Crear unos hábitos de sueño
Algo que influye mucho a la hora de tener un sueño reparador es crear un hábito de sueño diario. Es importante irse a dormir cada día sobre la misma hora y levantarse también a una hora aproximada. De esta forma el cuerpo interpreta que esas son las horas de descanso y cuando llega el momento de irse a dormir ya se encuentra “preparado” para descansar durante las próximas horas.
Estos son solo algunos de los hábitos que más influyen en la calidad del sueño, sin olvidar otros como son el estrés, para lo que se recomienda la meditación o el deporte; o factores psicológicos como la ansiedad, donde se recomienda la prescripción médica durante el tiempo que sea necesario para descansar con normalidad y así evitar que afecte a nuestro día a día.