El puente de diciembre dejará una de cal y una de arena en Vigo. Aunque el fin de semana se podrá disfrutar de las luces de Navidad sin problema, sobre todo por parte de los miles de turistas que desembarcarán estas fechas, la previsión para los últimos días es poco halagüeña. El pronóstico del tiempo avisa de la entrada de “frentes asociados a las borrascas que circulan por el Océano Atlántico”, que dejarán lluvia y viento que soplará con intensidad.
A corto plazo, se prevé alguna precipitación para la madrugada del viernes 3 al sábado 4 de diciembre, pero durante el día no habrá chubascos. Alternarán “nubes y claros”, una situación que se repetirá el domingo. Las temperaturas serán “normales” para la época y oscilarán entre los 9ºC y los 14ºC. Así pues, el tiempo no pondrá obstáculos para pasear por el centro de Vigo en medio de adornos y luces LED.
El escenario empezará a mudar el lunes, primer festivo de la semana, con un progresivo aumento de la nubosidad, que traerá precipitaciones de carácter débil a medida que avance la jornada. Sin embargo, el martes se notará un aumento de las rachas de viento, que arreciará con más fuerza. Mientras, los aguaceros no serán fuertes pero si continuos a lo largo de todo el día. Meteogalicia habla de un “predominio de la circulación del oeste” con entrada de los mencionados frentes activos. Las temperaturas no experimentarán cambios significativos.
Se aguarda un panorama similar para el miércoles, también festivo, con las ráfagas de viento como protagonistas y la lluvia como acompañante. El parte más allá del día 8 puede variar, pero todos los servicios meteorológicos coinciden al vaticinar más inestabilidad para el resto de la semana. Aunque el viento dejará de incordiar, se esperan chubascos de carácter débil a partir del jueves.
Este mal tiempo para los últimos días del puente puede provocar cancelaciones de última hora en los hoteles de Vigo. No obstante, muchos viajes son concertados con agencias de diferentes puntos de España, lo que propicia que el nivel de ocupación se mantenga alto. Actualmente, ronda el 95% para las noches del sábado y del domingo. Aunque para el resto de jornadas algunos establecimientos tienen sus camas llenas, la media oscila entre el 85% y el 90%.