El secretario general de la Asociación de Industrias del Metal y Tecnologías Asociadas de Galicia (Asime), Enrique Mallón, ha mostrado este jueves su preocupación por las consecuencias para el sector del conflicto iniciado por Rusia.
“La automoción gallega tiene una relación comercial directa con los territorios de Rusia y Ucrania, pero también la industria naval, instalaciones de frío, tubería industrial… La preocupación es máxima”, ha dicho.
Mallón ha destacado que, cuando se empiece a imponer sanciones económicas a Rusia, la industria gallega y la economía mundial se verán afectadas.
Será, ha dicho, un nuevo elemento que vendrá a sumarse al panorama de incertidumbre motivado por el encarecimiento desorbitado de las materias primas, los costes logísticos y de energía o la falta de personal cualificado.
Mallón se ha expresado en este términos durante una jornada dedicada a analizar las oportunidades de financiación para la industria gallega, organizada en colaboración con el Banco Santander, que ha tenido lugar en la sede de Asime y en la que han participado representantes de empresas industriales punteras.
Entre las diferentes conclusiones a las que han llegado los presentes, está la de que el sector se enfrenta a un entorno de gran volatilidad, por lo que una buena planificación a nivel financiero será clave para encarar la recuperación económica esperada en los próximos meses.