El sueño que Jacobo y Sesé vislumbraron hace 25 años se materializó este martes en Vigo. El ‘Hidria Segundo’, el único vapor en activo de España, que estuvo a punto de ser desguazado en 1997 y fue rescatado por los artífices de este “milagro”, arribó a Portocultura este 12 de abril de 2022.
Lo de “milagro” no es un recurso, es la palabra con la que Sesé define el éxito conseguido tras tantos años de lucha. Ya hace meses confesaba a VIGOÉ lo “mucho” que ha costado llegar hasta aquí. Ahora, el histórico aljibe que estuvo en servicio en la ría de Vigo durante la segunda mitad del siglo XX descansa rehabilitado en el muelle en el que amarró por primera vez y con la garantía de estar protegido por decreto.
Sus propietarios, Jacobo Costas y Sesé Otero, lucharon durante todo este tiempo para mantener el barco y evitar su desaparición. Su pelea ha obtenido por fin réditos al recalar de nuevo en la dársena de O Berbés. Ya por la mañana partía de Bouzas para completar la travesía que le debía llevar a su ‘casa’. Tras tocar mar nuevamente, después de su reestreno el pasado mes de julio, llegó a la zona de Portocultura, donde permanecerá ya para siempre.
El ‘Hidria Segundo’ es una joya de las Rías Baixas. Se trata del único vapor en activo de España y mantenerlo con vida ha supuesto una batalla permanente desde 1997. Jacobo y Sesé vendieron su casa y su batea para dejarlo todo y transformar este barco en su vivienda. Tras varias reparaciones en el astillero Cardama de Bouzas, ha sido trasladado al mismo sitio que ocupaba cuando era aljibe. La intención es realizar actividades culturales “atracado” y, más adelante, “navegando”, según explican sus dueños.
En colaboración con la Fundación Traslatio, organizadora de la Ruta Xacobea Iacobus Maris, y la Autoridad Portuaria de Vigo, el barco aspira ahora a convertirse en un estandarte cultural y turístico del puerto olívico. La ubicación será definitiva para que el aljibe pueda enseñar su funcionamiento y su historia con Vigo, con visitas abiertas al público como centro de información de la Ruta Xacobea Iacobus Maris, centro de talleres de formación náutica, de eventos, como museo, o lugar de conferencias. Todo ello cerca del futuro visor submarino que va a situar la Autoridad Portuaria en la dársena de A Laxe. Ambos atractivos servirán para llevar turismo al puerto.
“Como armadores del ‘Hidria Segundo’, Jacobo Costas y yo estamos encantados de llegar por fin al muelle de Portocultura”, afirmaba estos días Sesé Otero. “Estamos muy contentos de que no sea de manera individual, sino en colaboración con la Fundación Traslatio, porque eso hace que haya una sinergia entre las fundaciones, las empresas y el Puerto de Vigo en lo que vemos como una parte patrimonial importante de la ciudad, algo que debe ser para el disfrute de todos. Esperamos que se unan muchas otras empresas y que se cree alrededor del ‘Hidria’ y del Puerto de Vigo un referente de cultura marítima”, prosigue.
Además, se está trabajando en la creación de un pantalán histórico-cultural en pleno centro de la ciudad, concretamente en la dársena de A Laxe, frente al edificio de Portocultura, donde facilitar el atraque de los buques insignia del Puerto, logrando, de esta manera, poner en valor el patrimonio marítimo local, facilitando el atraque de los buques que forman parte de la historia de la ciudad, como el ‘Hidria’ o el ‘Rías Bajas’, reformado recientemente.
Pura Historia de Vigo
El ‘Hidria Segundo’ fue construido en el astillero ya desaparecido José Roberto e hijos (Teis) entre los años 1963 y 1966, cuya finalidad inicial era la de servir de aljibe para la empresa Aljibes de Vigo para suministrar agua de manantial a mercantes, transatlánticos y pesqueros en la ría de Vigo. El manantial estaba situado en la ‘Canteira de Meira’ y la empresa tenía un muelle propio en las inmediaciones, donde el barco atracaba y cargaba hasta 240 toneladas.
La maquinaria de vapor la heredó de su antecesor el ‘Hidria’, que comenzó a trabajar para la misma empresa en 1922 y se hundió en el puerto de Vigo en 1959, tras lo cual fue reflotado y desguazado, conservándose la maquinaria de vapor para ser instalada posteriormente en el nuevo barco, bautizado ‘Hidria Segundo’. La empresa quebró en 1994 y dejó abandonados en el puerto de Vigo a sus dos últimos barcos, el ‘Roberto’ y el ‘Hidria Segundo’.
En 1997 se hundió en el Puerto de Vigo y fue llevado al desguace de Punta Lagoa donde el 6 de junio de ese mismo año, Jacobo y Sesé lo compraron para convertirlo en buque museo a vapor. Tiene una máquina de triple expansión alternativa de alrededor de 1910 que había heredado de su antecesor el ‘Hidria’, y también en buque de pasajeros.