Esta fotografía fue tomada el pasado 9 de abril de 2022. Se trata de la escultura dedicada a la familia (“A familia”) y realizada por Manuel Buciños. Fue inaugurada el 3 de marzo de 2019 coincidiendo con la humanización de la Vía Norte, en su confluencia con la Rúa Urzaiz, de Vigo. La obra, realizada en bronce, está constituida por cuatro figuras: un padre, un hijo, una madre y una hija. Las figuras están colocadas sobre un banco de piedra con forma de barco, observando la ría. En la fecha mencionada, el 9 de abril de 2022, ya faltaba la figura del hijo y el brazo del padre, algo sorprendente. Sin embargo, no se tomó ninguna medida relacionada con el suceso porque en la madrugada del 23 de abril —-catorce días más tarde—- unos vándalos arrancaron la mayoría de las piezas que aún quedaban instaladas. Por la diferencia entre la fecha de esta imagen y la fecha del robo que saltó a los medios de comunicación queda demostrado que sí hubo tiempo de sobra para evitar el destrozo. Esto demuestra que algo está fallando. ¿No hay cámaras operativas que pueden avisar con antelación de estas fechorías? ¿No hay ningún tipo de vigilancia? ¿O acaso es la propia ciudadanía la que tiene la exclusividad de vigilar el mobiliario urbano? ¿Volverá a ocurrir algo similar?