“Hoy estamos inaugurando un gran hotel. Aquí había un bodrio, un horror que yo veía cuando venía a pasear a Samil y que estuvo aquí más de 50 años”. Así calificó el alcalde al antiguo Hotel Samil, que ya es historia, pero que habitó el litoral vigués desde 1968 hasta comienzos de 2019, aunque ya cerraría sus puertas en 2016.
A las 12.55 h de este miércoles se daba por inaugurado el nuevo hotel de Samil, llamado Hotel Attica 21 Vigo Business & Wellness, “concebido por y para Samil, cediendo el protagonismo al entorno natural que lo rodea”, según explicó Manuel Ángel Jove, co-presidente junto con su hermana Felipa Jove del grupo Inveravante, propietario de la cadena hotelera Attica.
En donde durante casi 51 años estuvo el Hotel Samil, hoy se erige un hotel de 4 estrellas superior con 157 habitaciones de entre 28 y 65 metros cuadrados, todas con terraza y muchas con unas impresionantes vistas a las islas Cíes. No deja de ser una construcción (tres edificaciones para ser más exactos) a pie de playa, pero con un diseño arquitectónico más moderno, propio del siglo XXI, en el que se han invertido más de 25 millones.
Tanto el alcalde como el director del hotel, Danielle Provezza incidieron en el mérito arquitectónico del proyecto, con un diseño liviano que “parece que está flotando sobre las aguas del mar”, según destacó Provezza.
Un recorrido por el interior del edificio principal permite ver una apuesta por la madera y el cristal como elementos principales, combinados con paredes y suelos en blanco, gris o incluso negro. Ambientes sobrios pero modernos, con gran protagonismo para la luz natural que entra en cantidad incluso en un día medio nublado como era el de esta jornada.
Aunque el acto de inauguración tuvo lugar esta mañana no será hasta la próxima semana –seguramente el martes- cuando las instalaciones abran sus puertas a la ciudadanía. Entonces se podrá disfrutar de la terraza panorámica para degustar la cocina atlántica del restaurante Beira con vistas al mar.
También desde la próxima semana se podrá probar la zona de spa, con un circuito de hidroterapia, baño turno, sauna finlandesa, duchas de esencias o los jacuzzis al aire libre, algo que no es muy frecuente en los hoteles de ciudad.
Todos estos servicios, junto con la piscina exterior y el gimnasio están abiertos para todo tipo de clientes tanto si están alojados como si no lo están en el hotel. De hecho, los primeros clientes no llegarán a las habitaciones hasta el 1 de julio, diez días después de la apertura del resto de los servicios.
Attica 21 arrancará julio con el 80% de sus reservas ocupadas tanto por clientes nacionales (alrededor de un 60%) como internacionales (muchos de Portugal, resto de Europa e incluso Estados Unidos).
Además, con el objetivo de mantener la ocupación durante todo el año, la estrategia del hotel incide en el cliente de negocios a partir de septiembre, con acuerdos ya cerrados con empresas locales para atraer huéspedes y precios especiales para estancias de ejecutivos. El director del hotel explicó que ya para este verano tenían numerosos eventos contratados. Para ello el nuevo establecimiento dispone de un área de 900 metros cuadrados de instalaciones para eventos y reuniones.