Justo cuando se empezaba a encarrilar la situación en la parroquia de Mourentán, en Arbo, donde la superficie quemada ya se había perimetrado y no había llama, el fuego ha empezado a azotar la vecina núcleo de Barcela. Se trata de un punto cercano a la frontera con Portugal en el que se ha declarado un incendio forestal a las 15.40 horas de este miércoles.
La situación al otro lado de la ‘raia’, cerca del área portuguesa de Bemposta, comenzó a complicarse pasadas las 14.30 horas y finalmente afectó al territorio gallego. Las llamas han cruzado el río Miño y ha empezado a arder terreno pertenecinte al municipio de Arbo.
Poco después, la Consellería do Medio Rural tuvo que solicitar, como medida preventiva, la situación 2 por la proximidad del fuego con el polígono industrial de la zona. También se ha pedido la intervención de la Unidad Militar de Emergencias (UME). El humo, además, ha afectado a la línea de tren.
La Xunta ha desplazado al lugar a un técnico forestal, cuatro agentes, nueve brigadas, ocho motobombas, dos palas, dos aviones y tres helicópteros. A las 19.45 horas se calculaba que la superficie quemada ya ascendía a 70 hectáreas.
Así pues, se abre otro foco de preocupación en la provincia de Pontevedra, después de que se extinguiera el incendio forestal de Oroso (A Cañiza) y se controlara el de Padróns (Ponteareas). Ourense también se está viendo muy castigada con los fuegos que padecen las localidades de Maceda y Verín.
En este último, las llamas se han acercado a las casas y a la planta de Aguas de Sousas. Poco después, obligaron a cortar la A-52 y la N-525 a su paso por la zona. A las 19.45 horas ya se contabilizaban más de 260 hectáreas quemadas.
“Tres focos de lume ao lado das vivendas en Verín, con 40ºC de temperatura e cambios de vento. Un lume totalmente intencionado, buscando facer o maior dano posible ás persoas e bens. Se tes calquera sospeita, denuncia de xeito anónimo e gratuíto no 900 815 085”, ha publicado Medio Rural en sus redes sociales.