La Xunta ha extendido este jueves la prealerta por escasez de agua a la cuenca del río Anllóns, en A Coruña, y la mantiene en la cuenca del río Lérez, mientras intensificará el seguimiento de los embalses de Zamáns, en Vigo, y Baiona.
Son decisiones acordadas en una nueva reunión de la Oficina Técnica de la Sequía, presidida por la directora de Aguas de Galicia, Teresa Gutiérrez, e integrada por Protección Civil, Meteogalicia y la Consellería de Medio Rural.
La Xunta está siguiendo de forma exhaustiva la evolución de los embalses de Zamáns y Baiona, de los que se abastecen localidades como Baiona, Nigrán, Gondomar y parte de Vigo.
Para esa zona, la Xunta propone que se empiecen a tomar ya las mismas medidas que en ayuntamientos que ya tiene activada la prealerta por escasez; es decir: cierre de duchas y lavapiés en las playas, prohibición de baldeos y llenado de piscinas, etcétera. Algunas de esas decisiones se han tomado ya.
Según el último boletín hidrológico, con datos del pasado lunes, los mencionados embalses están a casi dos tercios de su capacidad. Por su parte, el de Eiras, el que más abastece a Vigo, roza el 90% de ocupación.
En la reunión, en la que se analizó la evolución de la situación hidrológica y meteorológica, también se acordó mantener la declaración de sequía prolongada en toda la Demarcación Hidrográfica de Galicia-Costa como resultado de la continuidad de la anomalía hidrológica que se viene advirtiendo desde comienzos de año.
La propuesta de activación de prealerta por escasez de agua en la zona correspondiente al sistema de explotación del río Anllóns y a la costa de A Coruña hasta el límite con Arteixo viene motivada por los datos de la estación de aforo del río Anllóns, que manifiestan un drástico descenso de los caudales en el últimos mes, y por las previsiones de falta de lluvias a corto y medio plazo.
Esta prealerta se une a la ya declarada en la cuenca del Lérez, río del que se abastecen varios ayuntamientos de la zona que se han coordinado para tomar medidas de ahorro de agua tras ser informados del drástico descenso en cuestión de semanas del caudal del río.
La Xunta, en todo caso, trabaja en el estudio de soluciones alternativas para aportar agua al Lérez y ayer se tomaron muestras de agua del foso de Ventoso, en Forcarei, para confirmar si tiene la calidad suficiente para ello.
Si las analíticas son favorables, Augas de Galicia procederá a realizar una obra de emergencia para trasvasar el agua desde el foso minero hacia el Ventoso, afluentes del Lérez, para aumentar el caudal de este último.