El gobierno local de Vigo ha cuestionado el informe hecho público este jueves por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), que sitúa el bus urbano como el más caro de las ciudades de España, y ha matizado que dicho informe “parte de dos premisas erróneas”.
Así, en un comunicado, el gobierno que preside Abel Caballero ha puntualizado que el estudio de la OCU asegura que utiliza la “combinación más barata” pero, en el caso de Vigo “no es cierto” porque el viaje más barato en el bus de la ciudad cuesta cero euros (para pensionistas 1 y 2 con la tarjeta Pass Vigo, que suponen un tercio de los desplazamientos).
“Para hacer correctamente este cálculo, el gobierno vigués entiende que la OCU debería utilizar la media ponderada de los distintos precios en relación a los porcentajes de uso que tiene el transporte vigués”, ha señalado, y ha añadido que esa media es de 0,41 euros, por lo que el coste de 50 viajes sería de 20,5 euros y no de 31,15 euros, como refleja el informe.
La segunda de las premisas erróneas es, según el gobierno municipal, no tener en cuenta que los ciudadanos de Vigo pagan por viaje efectivo realizado, mientras que los abonos mensuales en otras ciudades no implican, necesariamente, el uso de todos los viajes.
Por otra parte, el alcalde de la ciudad, ha vuelto a exigir en rueda de prensa a la Xunta de Galicia que aporte recursos para bonificar el bus urbano en la ciudad, como ya hacen el Ayuntamiento y, desde este jueves, el Gobierno central (el precio ordinario del billete con la tarjeta Pass Vigo pasa a costar 0,62 euros, frente a los 0,89 euros que costaba hasta ahora, o a los 1,40 euros del billete sin bonificar), y poder así reducir todavía más el precio de cada viaje.
Transporte metropolitano
La Xunta ha respondido a la demanda del alcalde recordando su negativa a integrar el bus urbano de Vigo en el sistema de transporte metropolitano, lo que permitiría a los usuarios ahorros de “entre el 40 y el 50%”.
En ese sentido, la delegada territorial del gobierno gallego, Marta Fernández-Tapias, ha señalado que, con su decisión, el alcalde está privando a los vigueses de ahorrarse más de 460 euros al año y de acceder a las ventajas que, desde hace años, tienen los vecinos de otras ciudades que sí se sumaron a este sistema.
“El Ayuntamiento es el único responsable de que los vigueses no se beneficien de mayores ahorros en sus desplazamientos (…) por su permanente confrontación con la Xunta de Galicia”, ha sentenciado.
Según ha recordado Fernández-Tapias, la Xunta aporta anualmente 1,2 millones de euros para financiar descuentos del 80% en billetes interurbanos del área de Vigo (entre bus y transporte de ría) y con bonificaciones adicionales a usuarios recurrentes y familias numerosas. Asimismo, con la Tarxeta Xente Nova, los menores de 21 años viajan gratis por toda Galicia en los buses autonómicos.
Por su parte, los municipios adheridos a esta área metropolitana de transporte (Baiona, Cangas, Fornelos de Montes, Moaña, Mos, Nigrán, Pazos de Borbén, O Porriño, Redondela, Salceda de Caselas, Salvaterra de Miño y Soutomaior) aportan 283.000 euros al año.