La transformación de Vigozoo es otro de esos múltiples proyectos anunciados de forma reiterada y que no terminan de concretarse. Los planes del Concello datan de antes de la pandemia, pero parece que ahora por fin empiezan a tomar forma.
El alcalde, Abel Caballero, comentó en diferentes ocasiones en los últimos años que quería poner fin a la cautividad de animales en A Madroa mientras se seguían licitando contratos de miles de euros para suministrar comida para las especies existentes. Ahora el concurso público que se está preparando es el del cambio de filosofía. Al menos, según asegura el regidor vigués.
“Estamos trabajando con mucha intensidad en la transformación de Vigozoo”, declaró este lunes, sin precisar plazos. “No se puede tener animales salvajes en cautividad, esto es intolerable”, añadió a pesar de albergar varios ejemplares que, poco a poco, están siendo enviados “a parques con más espacio”.
El propósito es convertir Vigozoo en un “centro de ocio medioambiental” que contará con un mirador a la ría, planetario, casetas en árboles, instalaciones para los campamentos de verano, aulas educativas, huertas, rocódromo y tirolinas.
Esta parece ser la atracción estrella, por eso Caballero prometió que esas tirolinas serán “de recorrido larguísimo” y aprovecharán la “enorme pendiente” de la zona para que la gente se divierta a la vez que se garantiza “toda la seguridad”.
En todo caso, el alcalde de Vigo afirmó este lunes que el Ayuntamiento ya ha dado algunos pasos en la transición hacia un modelo más sostenible y respetuoso con los animales. “La zona alta, donde estaban los leones y las aves acuáticas, ya la tenemos transformada y vamos a solicitar una reforma integral” para que la ciudadanía y particularmente la gente joven “entienda muy bien” la relación con la naturaleza.