La exposición ‘Un poema para Laxeiro. Dibujos y pinturas’, realizada por José María Barreiro y Antón Pulido y comisariada por Xosé Antón Castro, fue inaugurada este jueves por la tarde en la Fundación Laxeiro, que tiene su sede en la Casa das Artes de Vigo. Allí se podrá visitar hasta el 19 de febrero.
Este proyecto, en el que está “volcado” el Concello de Vigo, según su alcalde, Abel Caballero, se lleva a cabo en el contexto del Año Laxeiro, propiciado por la decisión de la Real Academia Galega de Belas Artes de dedicar el Día de las Artes a la figura de Laxeiro. En este caso, con un proyecto expositivo en el que dos artistas vinculados al pintor le rinden homenaje en una muestra conjunta.
Comisariado por el crítico Xosé Antón Castro, el proyecto integra la obra de dos reconocidos artistas de lenguajes muy diferentes que, no obstante, encuentran puntos de diálogo, tanto en el cromatismo como en la gestualidad que define sus respectivas obras, dos elementos que funcionan como nexo de unión entre la obra figurativa de Barreiro y la obra abstracta de Pulido y que, como dice Antón Castro, «tienen un cordón umbilical estético al doble Laxeiro -el figurativo expresionista y el abstracto».
El resultado se plasma en una exposición que ocupa el espacio de exposiciones temporales de la Fundación Laxeiro, una suerte de instalación pictórica sin marcos, con parte de las obras dispuestas a modo de políptico, un recurso con el que se potencia la expansión del color y de la luz, a partir del trazo gestual característico de los dos artistas.
Los dos artistas concibieron la pintura, desde sus inicios, como una secreción de vida que ponen de manifiesto en la hoguera cromática de sus creaciones, rindiendo culto al color por encima de todo, un color esencialmente cálido, previsto desde la dimensión lírica de su concepción como rito poético y como un instante de la luz abrasadora que define una identidad marcada en el estilo de ambos.