Lo que se observa en la fotografía tomada en el barrio de Coia, en la ciudad de Vigo, no es nieve, sino polen, un polen tan abundante que cubre casi por completo la enorme superficie verde que avanza en los laterales de la Avenida de Castelao. Es el efecto de una primavera que llega inexorable, como todos los años.
Algunas personas llevan mascarilla o un pañuelo sobre la boca y la nariz para evitar los efectos alérgicos, que es su parte negativa. Sin embargo, la primavera siempre es bienvenida, con su luz y con sus colores intensos, y el barrio vigués de Coia se convierte en un lugar para disfrutar al aire libre en esta época del año.