El emisario de la antigua depuradora de Coruxo que surgió de entre la arena de la playa de A Foz tiene los días contados. La junta de gobierno local de Vigo ha aprobado este jueves el proyecto de demolición que había encargado a Aqualia FCC-Vigo UTE y se dispone a actuar de forma “inmediata” para que la temporada estival empiece sin este viejo conducto a la vista.
El alcalde en funciones, Abel Caballero, ha puesto una fecha tope a esta retirada del tubo: el 15 de junio. Para entonces, el emisario ya sería historia porque se esperará lo mínimo posible para empezar las obras.
Este conducto ya no se está usando. La puesta en funcionamiento de las nuevas instalaciones de Coruxo, que emplean otros emisarios que no están a la vista, lo convirtió en prescindible. No obstante, permanecía enterrado pero el paso de una borrasca de lluvia y viento lo dejó al descubierto a finales de noviembre, al mover la arena.
Por ello, el Concello de Vigo encargó en marzo la redacción de un proyecto para su demolición y, entretanto, pidió a la Autoridad Portuaria el permiso necesario para ello. Una autorización que fue concedida hace casi un mes con algunos condicionantes.
Además de cumplir con las exigencias que marque la Dirección General de Costas, dependiente del Estado, la administración local habrá de asumir cualquier daño o perjuicio causado, deberá devolver la zona a su estado original cuando acaben los trabajos y tendrá que adoptar todas las medidas preceptivas en materia de seguridad de las obras.