Expertos en rehabilitación neurológica del Hospital Vithas Vigo han alertado de la «peligrosa combinación» que supone el alcohol y la juventud, ya que puede provocar «efectos a largo plazo» en el cerebro.
Así lo ha señalado la directora médica del Instituto de Rehabilitación Neurológica de Vithas (Irenea), Belén Moliner, que ha explicado que el cerebro de un joven está en desarrollo activo durante la adolescencia y hasta la mitad de los 20 años.
En este tiempo, las conexiones neuronales se están formando y fortaleciendo y el cerebro experimenta cambios estructurales y funcionales que moldean las habilidades cognitivas, emocionales y de toma de decisiones.
Sin embargo, los jóvenes «con la excusa de divertirse» consumen alcohol y, a la hora de conducir, «las consecuencias pueden ser fatídicas». Al respecto, ha dicho que en 2022 más de 4.000 españoles requirieron de ingreso hospitalario tras sufrir un accidente de tráfico y precisaron rehabilitación.
Riesgo de depresión y ansiedad
Pero esta no es la única consecuencia que puede tener el alcohol a largo plazo en los más jóvenes, ya que los que más abusan «corren un mayor riesgo de desarrollar depresión y ansiedad» y pueden tener «dificultades para regular las emociones y controlar sus impulsos».
También estos jóvenes pueden «experimentar problemas cognitivos y académicos», según ha añadido la experta de Irenea de Vithas Vigo.
«Estas consecuencias son solo algunos ejemplos de los efectos que produce una exposición repetida al alcohol, ya que esta daña las células cerebrales y dificulta la formación de nuevas conexiones sinápticas. Una alteración del equilibrio químico del cerebro que afecta la liberación de neurotransmisores y genera cambios duraderos en la estructura y función cerebral», ha subrayado Moliner.
Ella ha recalcado que el porcentaje de borracheras y atracones masivos de alcohol en Galicia supera en varios puntos al conjunto de España, con un 22,6% frente a una media estatal del 15,4% de la población entre 15 y 64 años en 2022.
«Como especialistas en la detección y el tratamiento de alteraciones cognitivo-conductuales, en el Instituto de Rehabilitación Neurológica de Vithas hemos valorado a multitud de personas que inician un deterioro neurológico a una edad relativamente temprana y muchos de ellos presentaron como factor de riesgo el consumo de alcohol. Un factor que podría haber sido totalmente prevenible», ha sentenciado.