La presencia de los perros en las playas está prohibida durante el verano, pero cada vez se extiende más el clamar para flexibilizar el veto. Recogiendo las peticiones de los vecinos, el Concello de Nigrán ha abierto una consulta popular.
«Considera vostede oportuno regular a presenza de animais nas praias do municipio de xeito que no periodo estival poidan acceder a elas entre as 22:00 e 9:00 horas? (actualmente, entre o 1 de xuño e o 30 de setembro, está prohibida a presenza de animais en todos os areais de Nigrán agás na Praia do Carreiro e Praia do Canto)».
Esta pregunta se ha convertido en la primera consulta pública que lleva a cabo el Concello de Nigrán. Así lo anuncia este domingo en un comunicado en el que señala que los vecinos pueden expresar su opinión hasta el 15 de agosto. Lo pueden hacer a través de escrito o instancia presentada en el registro general o sede electrónica (sede.nigran.org). También mediante un formulario google en https://forms.gle/KVAW1vArkq8cEC7e9.
Sanecáns
El verano pasado Nigrán dio el paso para permitir la presencia de perros durante el periodo estival en las playas de O Canto y Carreiro. El Concello también recuerdo que se instalaron «sanecáns» en 2017 para depositar las cacas de las mascotas.
«Os propietarios de cans siguen demandándonos unha maior apertura ao respecto pero tamén temos moita veciñanza que se opón. Non é unha cuestión tan sinxela e queremos, deste xeito, palpar a opinión xeral da cidadanía», explica el alcalde, Juan González. En cualquier caso aclara que no valora «unha modificación de cara a que poidan acceder os cans durante o resto do día coincidindo coa presenza de milleiros de bañistas».
Multas graves
El alcalde de Nigrán incide en que, como contempla la ordenanza y no se pretende modificar, los perros deberían pasear por la playa atados por correa. Sería de la misma forma que en los demás espacios públicos del municipio. Igualmente, es totalmente obligatorio que el dueño recoja los excrementos.
«En caso de que finalmente se modifique a ordenanza ímos ser especialmente vixilantes de que os donos recollan as cacas porque, do contrario, se considerará unha infracción grave. Estas multas de hasta 600 € se impondrían por ser este un espacio de convivencia donde acuden cada día miles de personas, entre ellas niños.
«Precisamente, veñen a xogar na area.; este é xa un motivo suficiente para que non se poida soltar o can e que defeque en calquera lugar onde o dono non o pode controlar», insiste el alcalde. Además, ve «unha liña vermella» para que funcione la convivencia entre bañistas por el día y dueños de perros por la noche noche y a primera hora de la mañana.