Este 31 de agosto caducó el contrato de mantenimiento de las instalaciones vinculadas al Vigo Vertical. Y este 1 de septiembre debía entrar en vigor el nuevo. Con los plazos sobre la bocina, la junta de gobierno local ha adjudicado de forma definitiva este mismo viernes el concurso público activado en junio para encargarse del correcto funcionamiento de ascensores, rampas y escaleras mecánicas en la ciudad.
La firma Thyssenkrupp Elevadores, que ya se ocupaba de esta tarea, ha superado a Schindler y a Enor en la nueva licitación, que se ha cerrado con una rebaja económica sustancial sobre el importe inicial. El precio final del contrato se quedará en 419.135 euros, bastante menos que los 623.000 euros presupuestados. Estamos hablando de 575 euros al día.
De esa cifra total, 213.410 euros se destinarán a las rampas, 129.220 euros irán a parar a los ascensores urbanos y 76.505 euros a las escaleras mecánicas. El gasto es mayor en unos elementos que en otros en gran parte por cuestiones numéricas. Hay que supervisar 22 tramos de cintas transportadoras, doce elevadores y siete secciones de escaleras mecánicas. Su horario de funcionamiento va de 07.00 a 23.00 horas de domingo a jueves; los viernes y sábados se amplía hasta la medianoche.
Con esta adjudicación, queda garantizado el servicio durante dos años, con la posibilidad de dos prórrogas de un ejercicio cada una. Y, además, se pretende ganar en calidad. Las incidencias son frecuentes y suscitan quejas por parte de la ciudadanía. En terminar con ellas se empeñarán el Concello de Vigo y Thyssenkrupp, introduciendo una mejora “muy interesante” que se sirve de la tecnología.
Según ha explicado el alcalde de Vigo, Abel Caballero, el nuevo contrato incluye una cláusula que obliga a la empresa a atender las averías en un plazo máximo de dos horas. Para ello, se instalará un sistema que envía “una señal automática” a un centro de control para notificar la incidencia.
“Si se estropean, envían un mensaje que llegará a la oficina que vamos a contratar, que tendrá una pantalla. Y les llegará el mensaje ‘en este momento la rampa número 3 de la Gran Vía acaba de parar’”, ha ejemplificado el regidor. “La rampa envía el recado y antes de dos horas tiene que estar arreglada. Si no se arregla en dos horas, bajamos lo que le pagamos a la empresa”, ha añadido, aunque realmente se trata de un plazo que se da para que un técnico llegue al lugar, puesto que el arreglo puede ser complejo. Un tiempo de respuesta que se reduce a una hora en el caso de los ascensores.
Con este mecanismo, el Ayuntamiento de Vigo quiere minimizar las protestas, que eran asiduas en zonas como Camelias, donde se ha acometido una “gran reparación” del ascensor más problemático de la ciudad. El alcalde es conocedor de esta circunstancia. De hecho, confesó llamar “muchas veces” para dar parte de alguna avería. “El otro día nos pasó a Cristina [su esposa] y a mí en la calle Carral”, reveló. Para dar aún más “garantías”, se extenderá este sistema a la sala de tráfico de la Policía Local.
Otros servicios
Thyssenkrupp, además, planteó en la propuesta que ganó este concurso público la posibilidad de comunicar incidencias por medio de “un número de teléfono fijo, WhatsApp, correo electrónico y on-line a través de una página web”.
Asimismo, la compañía detalla una operativa especial para el período de Navidad, para el que propone la implantación de “equipos de atención crítica”. En esta línea, establece que el jefe de servicio esté localizable las 24 horas del día, pero no solo en las citadas fiestas sino todo el año.
La oferta de Thyssenkrupp también programa el mantenimiento preventivo en “horas valle” para minimizar la afección a las personas.
Elementos mecánicos incluidos
El contrato incluye varios elementos pertenecientes a una misma calle, como la Gran Vía o Segunda República, y otros que todavía están en proceso, como los previstos en Ramón Nieto y el Halo.
Concretamente, la firma tendrá que revisar los elevadores de Juan Ramón Jiménez, Pizarro, Marqués de Valterra, San Salvador, Camilo José Cela, Praza da Estación, Hispanidad con Romil, Travesía de Vigo con Aragón, Camelias con Hispanidad y el Halo.
Además, la empresa deberá encargarse del mantenimiento de las escaleras mecánicas de la calle Segunda República, la Praza de Portugal, la Rúa Talude y el entorno comercial de Pizarro.
Por último, las rampas incluidas en el servicio son las de la Gran Vía (que antes tenían un contrato propio), el centro de salud de Teis, el centro de salud de Lavadores, la calle Carral, la calle Escultor Gregorio Fernández, las que conectarán Travesía de Vigo con Aragón y las que unirán la Avenida Ramón Nieto con el Colegio Losada.